La industria pyme bajó por sexto mes consecutivo y el sector sólo está trabajando con el 58,6% de su capacidad instalada, según un reporte de la Confederación Argentina de la Meidana Empresa (CAME) que registró una caída de 5% de la actividad en octubre. Si bien aumentó levemente la proporción de industrias en crecimiento, el 74% cree que la situación de su empresa es regular, mala o crítica y sólo un 18,7% espera un repunte en los próximos tres meses y siete de cada diez empresas no planean inversiones en los próximos tres meses, indica el informe.
La CAME endilga a "la falta de liquidez del mercado, la baja calidad de la cadena de pagos, las tasas de interés excesivas y las dificultades para repagar los pasivos" la recesión en el sector. Estos factores, señalaron, "complican el negocio de las Pymes y están obligando a muchas empresas a achicarse o replantear su continuidad".
La producción de las pymes industriales cayó 5% en octubre frente a igual mes del año pasado, en sintonía con una economía en caída que entró formalmente en recesión por segunda vez en la era Macri.
La CAME indicó que el repunte de 5,6% que se había registrado en septiembre se explica, básicamente, por la estacionalidad del mes, pero el resto del año se acumula un retroceso de 1,9% frente a igual período de 2017.
Los datos surgen de la Encuesta Mensual Industrial de CAME realizada entre 300 industrias pymes del país y que incljuye varias industrias en Mendoza, en el sector alimenticio, productos de caucho y plástico, minerales metálicos, fabricación de maquinaria, entre otros. El Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) registró un valor de 79,8 puntos en octubre.
El calzado es el sector más afectado
Las bajas más acentuadas se dieron en calzado y marroquinería (-15%), seguido por productos de caucho y plástico (-10,8%), productos de madera y muebles (-10,4%), papel, cartón, edición e impresión (-8,5%), productos de metal, maquinaria y equipo (-7,3%), material de transporte (-3,3%), productos textiles y prendas de vestir (-3,3%) y productos eléctrico-mecánicos, informática y manufacturas (-2,5%).
En cambio, no tuvo variación la producción de productos químicos y crecieron la industria alimenticia (0,1%) y minerales no metálicos (1,6%), indica el relevamiento.
"No va a repuntar"
“La tendencia de la producción no parece repuntar y seguirá así por lo menos hasta mediados del año que viene”, señaló sobre este panorama Pablo Bozzanno, director ejecutivo de la Cámara de Industrias Informáticas, Electrónicas y de Comunicaciones de Centro de Argentina (CIIECCA).
“La capacidad instalada es inferior al 60%, las empresas por ahora no están despidiendo, pero tampoco renuevan los cargos que se van perdiendo”, advirtió. Detalló que las únicas empresas que están más fuertes “son las que exportan y se benefician de la devaluación y el nuevo precio del dólar”.Ç".
Achique, despidos y cierre
El panorama de las pymes es desolador según se desprende de los datos de la CAME: aunque en octubre mejoró la proporción de industrias con rentabilidad positiva: 36,3% frente a 32,1% en septiembre y 28,9% en agosto, sigue siendo elevado el porcentaje de industrias con rentabilidad negativa y nula.
Muchas empresas han achicado sus negocios, suspendido personal y reducido costos de todo tipo para sostener sus negocios.
En los últimos dos años se perdieron 59.876 puestos de trabajo registrados en la industria
“En el caso de la industria láctea se está atravesando una grave situación económica por el aumento de costos, la suba en el precio de la materia prima, los mayores costos laborales y la caída del consumo”, indisó al respecto Pablo Villano, presidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (APYMEL).
La cadena de pagos sigue deteriorándose. Según Daniel García, presidente de la Cámara Argentina de Fabricantes de Luminarias Eficientes y Domótica (CAFLED), “los proveedores quieren cobrar a 30 días y los clientes pagan a 120. Eso genera que las empresas del sector se endeuden a tasas exorbitantes”.
Los industriales consultados por CAME coinciden en que la cadena de pagos está en 120 días diferida y que son muchas las dificultades para descontar cheques.
El INDEC corroboró un fuerte retroceso de la producción industrial en septiembre