"Las cosas en Bolivia pueden salirse de control", dijo este sábado la chilena Michelle Bachelet, en un mensaje cuanto menos tardío. La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos recién este sábado advirtió sobre una salida de control en potencial de las cosas.
La situación de Bolivia lleva más de una semana fuera de control, con milicias mercenarias que avanzaron con secuestros y extorsiones hasta conseguir la renuncia del presidente constitucional Evo Morales, el domingo pasado. La ex presidenta chilena no cuestionó la legitimidad de la dictadura instaurada en Bolivia para ejercer el gobierno.
La oficina de la ex mandataria chilena en la ONU informó este sábado que recibió denuncias de muertes de manifestantes que habrían sido causadas por las fuerzas públicas de Bolivia. Recién entonces, Bachelet urgió a las autoridades de facto a garantizar la integridad y el derecho a la vida de quienes protestan por el cambio de Gobierno en el país.
La referencia de la voz de los derechos humanos de la ONU no aludió a la dictadura instaurada en Bolivia. Sólo a un potencial desmadre de las cosas.
En un comunicado, Bachelet reportó que el viernes murieron por lo menos cinco manifestantes en Sacaba, Cochabamba. “Presuntamente a consecuencia del uso de munición letal por parte de las fuerzas de seguridad”, estimó.
“Tenemos información de que al menos 17 personas han fallecido en el contexto de las protestas, incluidas 14 sólo en los últimos seis días”, señaló.
"Uso desproporcionado de la fuerza"
“Mientras que las primeras muertes se produjeron como resultado de enfrentamientos violentos entre manifestantes rivales, las más recientes parecen derivar de un uso innecesario o desproporcionado de la fuerza por parte de personal policial o militar”, soltó la Alta Comisionada.
“Realmente me preocupa que la situación en Bolivia pueda salirse de control si las autoridades no la manejan cuidadosamente, de acuerdo con las normas y estándares internacionales que rigen el uso de la fuerza, y con un respeto pleno por los derechos humanos”, dijo.
"El país está dividido"
“En una situación como esta, las acciones represivas de parte de las autoridades simplemente avivarán más esa ira", espetó la funcionario del organismo. "Pueden poner en peligro cualquier camino de diálogo posible”, agregó.
La Alta Comisionada llamó a las autoridades a revelar el número de personas arrestadas, heridas y fallecidas durante las protestas. Pidió investigar con celeridad, imparcialidad, profundidad y transparencia los hechos para que haya una rendición de cuentas de los responsables.
“Esta situación no será resuelta por medio de la fuerza y la represión. Todos los sectores tienen el derecho a hacer oír sus voces, cuestión fundamental para la democracia. Insto a todos los actores, incluyendo a los manifestantes, a que renuncien a la violencia para transitar hacia una solución pacífica a la crisis actual”, concluyó Bachelet.