El sindicato petrolero de Neuquén, Río Negro y La Pampa está a poco de conseguir que se le ponga un cepo a la mano de obra "extranjera" en los yacimientos de Vaca Muerta. Con un cambio del régimen laboral de los operarios, se busca bloquear, o acotar al mínimo posible, el flujo de trabajadores que viven en provincias alejadas y se desempeñan en las petroleras que explotan el gas y el petróleo de la famosa formación no convencional.
La modificación que pide el sindicato con el apoyo pleno del gobernador neuquino Omar Gutiérrez ya comenzó a negociarse con las petroleras. Consiste en cambiar el régimen actual que prevé 14 días continuados de trabajo por siete seguidos de descanso a uno con tres días de descanso después de seis de trabajo. Los petroleros tienen un convenio que estipula que los trabajadores deben descansar un día cada dos trabajados, pero la implementación de esa relación se resuelve directamente con las empresas.
Si se juntan dos semanas de trabajo continuo seguidas por otra completa de descanso, los foráneos tienen mejores chances de tomar empleos en los yacimientos sin necesidad de mudarse. En cambio, con el régimen que impulsa el gremio y el gobierno de Neuquén viajar grandes distancias los días de descanso sería inviable por el acotamiento de los tiempos.
Guillermo Pereyra, secretario general del sindicato, dijo que las petroleras aceptarán la modificación que impulsa su gremio "porque no cambia la relación dos por uno que está en el convenio". De todos modos no arriesgó cuánto tiempo demandará bajar la idea a la práctica.
Este miércoles se reúne la denominada Mesa de Vaca Muerta en Neuquén, en sintonía con el inicio de la Oil & Gas Patagonia que organiza el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas. En ese ámbito será el gobernador Gutiérrez quien defienda la modificación al régimen laboral de los petroleros.
Pereyra explicó que el proyecto alcanza a todos los yacimientos con afiliados a su gremio, no sólo a los desplegados en Vaca Muerta, aunque en los últimos años los petroleros que llegaron a la provincia en su gran mayoría fueron absorbidos por proyectos no convencionales en la formación. "Hay empresas que están trabajando 28 por 14. Eso no puede ser", despotricó el líder sindical y senador nacional por el MPN.
El sindicalista admitió que el freno al flujo de mano de obra ajena a la provincia es el motivo fuerte del cambio de régimen que promueve. No obstante, no es el único. El Sindicato de Petroleros hizo un seguimiento de los accidentes de trabajo en los pozos y llegó a la conclusión de que la mayoría se producen después del sexto día de trabajo continuo de el o los involucrados. Además, Pereyra consideró que tantos días seguidos fuera de la casa, lejos de la familia, favorecían a la proliferación de adicciones entre los trabajadores.