"Han traicionado las esperanzas de los sobrevivientes de la bomba atómica y las de millones que buscaron la eliminación de las armas nucleares", cuestionaron.
Los alcaldes de las ciudades japonesas Hiroshima y Nagasaki, las únicas atacadas con armamento nuclear al final de la Segunda Guerra Mundial, enviaron cartas de protesta al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por un nuevo experimento nuclear de Washington.
"Han traicionado las esperanzas de los sobrevivientes de la bomba atómica y las de muchos millones que buscaron la eliminación de las armas nucleares", manifestó el alcalde de Hiroshima, Kazumi Matusi, en la misiva enviada a la Casa Blanca, confirmaron este jueves fuentes del gobierno local de Hiroshima, citadas por EFE.
La Administración Nacional de Seguridad Nuclear estadounidense (NNSA, por sus siglas en inglés) informó el martes pasado que en algún momento entre julio y septiembre llevó a cabo, en un laboratorio del estado de Nuevo México, un experimento con una cantidad pequeña de plutonio para probar la capacidad de su armamento nuclear.
En este sentido, el alcalde de Hiroshima consideró que este experimento nuclear levanta sospechas sobre el compromiso del presidente Obama con un mundo libre de armas nucleares, tal y como expresó el mandatario estadounidense en su discurso de Praga de 2009.
"Los repetidos experimentos y pruebas atómicas indican que los Estados Unidos pretenden aferrarse a su arsenal nuclear de manera indefinida, por lo que experimentos de este tipo son inaceptables", dijo Matsui.
Por su parte, el alcalde de Nagasaki, Tomihisa Taue, envió otra carta al presidente estadounidense en respuesta al experimento y con un mensaje prácticamente idéntico, según la agencia Kyodo
La NNSA informó a través de su página web que el experimento, llamado "Z machine", genera fuertes rayos X para crear una reacción de fusión y fue probado en algún momento entre julio y septiembre en un laboratorio del estado norteamericano de Nuevo México.
Las ciudades de Hiroshima y Nagasaki son las únicas que fueron atacadas con armamento nuclear, en los días finales de la Segunda Guerra Mundial.
Cada vez que se produce una prueba con armas nucleares en el mundo los responsables municipales de estas dos ciudades envían cartas de protesta a los gobiernos implicados.