Empresarios enfermos construyeron empresas sanas en la Argentina. Es la visión del gobierno de Mauricio Macri sobre las presuntas ciomas en la obra pública. Separa los negocios de las empresas. Y sigue.
La semana pasada se abrieron los sobres de la licitación de la construcción de la represa El Tambolar, la cuarta proyectada sobre el Río San Juan. El ministro del Interior Rogelio Frigerio y el gobernador Sergio Uñac encabezaron el acto.
Se presentaron cuatro sociedades con formato de UTE. Está pendiente la revelación del monto que cotizó cada una por la obra. En los cuatro grupos, alguna de las empesas integrantes está en los Cuadernos de Centeno, como se conoce a la trama mediático judicial de una denuncia por coimas en torno a la obra pública durante el kirchnerismo.
Las cuatro uniones de empresas que pugnan por hacer la represa sanjuanina, que tiene un presupuesto de 750 millones de dólares, son:
- 1- China International Water & Electric Corp, EISA Energía SA. y Boetto y Buttiggliengo SA.
- 2- Panedile, SACDE, Sinohydro, y Petersen, Thiele y Cruz.
- 3- Techint y Tecnología en Servicios Urbanos (TESUR SA).
- 4- CGGC Green, Dumandzic y el Tambolar UT.
Los cuadernos del juez Claudio Bonadío y el fiscal Carlos Stornelli, los atraviesa a los cuatro.
En el primer grupo aparece EISA Sociedad Anónima, que es Electroingeniería, la compañía originaria de Córdoba, de Osvaldo Acosta y Gerardo Ferreyra, quien está detenido en el marco de la causa que controla Bonadío.
En el segudo figura Panedile. Hugo Dragonetti, su dueño, es uno de los empresarios procesados por Claudio Bonadío por integrar una presunta red de coimas en obras públicas.
Otra socia de la UTE presentada en segundo término es la nave insignia del grupo de la familia Esquenazi Petersen, Thiele y Cruz, que está ausente en la causa de Bonadío, para sorpresa del mundo empresarial. Y también participa SACDE, como se denomina IECSA, la empresa fundada por Franco Macri, desde que Angelo Calcaterra se la vendiera a Marcelo Mindlin, un empresario allegado a Mauricio Macri. Calcaterra es primo del presidente. Se quedó con IECSA cuando Macri saltó a la arena política. La vendió cuando Macri ya había asumido la Presidencia.
El tercer grupo es enteramente de Techint, del magnate Paolo Rocca, implicado en las coimas, según el juicio primario del juez Bonadío. Para esta obra conformó una UTE con TESUR, que es parte del conglomerado industrial más grande del país.
El cuarto participante en el concurso por la obra de 750 millones de dólares tiene entre sus miembros a las constructoras Green y Dumandzic, cuyos responsables están mencionados como dadores de coimas en la causa de Bonadío.
