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Los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de la Normal Rural de Ayotzinapa rechazaron las declaraciones sobre la investigación ofrecidas por el procurador general de México, Jesús Murillo Karam, al indicar que sus hijos fueron asesinados, según la confesión de tres detenidos de la banda criminal Guerreros Unidos.
Felipe, padre de uno de los estudiantes, repudió que Murillo haya dicho que encontraron restos calcinados que pueden corresponder a los 43 normalistas desaparecidos desde el pasado 26 de septiembre, y destacó que “mientras no haya pruebas contundentes para nosotros nuestros hijos están vivos”.
“Hoy quieren hacer creer nuevamente a la sociedad que los muchachos están muertos”, subrayó. Indicó además que de los diez compromisos del gobierno federal con los padres de familia no ha cumplido ninguno y exhortaron a buscar a sus hijos como se buscan a los desaparecidos con indicios de vida.
“Hasta el día de hoy no se ha mostrado ni siquiera la foto de ellos (...) Tampoco han cumplido para que puedan participar expertos de otros países en las investigaciones para buscar a los estudiantes”.
Otro de los padres de los 43 normalistas dijo que "no puede ser que la única versión sea la de los detenidos", y aseveró que creen que están vivos.
“No es posible que sigamos aceptando la forma como siguen torturando a los padres de familias y que no sabemos como tienen a nuestros hijos”, recordó un tercer padre de familia e instó al presidente Peña Nieto a cumplir lo que les prometió: que iban a tener toda la tecnología a su disposición para la búsqueda de los estudiantes.
Los padres aseguraron que están luchando por la verdad y aseguraron que no se limitarán a tener las declaraciones de los tres detenidos. “Aceptarlo sería una irresponsabilidad del Gobierno nacional”.
