Más de seis horas demándó la declaración indagatoria del vicepresidente Amado Boudou en la causa Ciccone concretada este lunes. El funcionario fue interrogado por el juez federal Ariel Lijo y el fiscal Jorge Di Lelo.
El vicepresidente llegó a tribunales cerca de las 11 acompañado por sus abogados Diego Pirota y Eduardo Durañona. La audiencia se realizó sin cámaras de televisión porque el juez rechazó la solicitud de Boudou para grabar la declaración.
La defensa de Boudou esgrimió que la grabación de la indagatoria tenía como objetivo "despejar cualquier duda o interpretación que ponga en peligro la realización del acto". El juez desestimó los argumentos y negó la posibilidad de que se registrara la audiencia en video.
La indagatoria se realizó en el despacho del juez, ante un secretario letrado que tomó nota de las expresiones del vicepresidente, para dejar constancia de ellas en un acta.
