Para el documentalista, la nueva ley, sin embargo, es mejor que nada para los que perdieron la cobertura. Abogó por una asistencia universal de la salud.
"El ObamaCare (el nuevo programa de Salud de Estados Unidos) es horrible", dijo el documentalista Michael Moore en un artículo en el New York Times, donde subrayó que "muchos liberales han evitado decirlo en voz alta por miedo a ayudar a los enemigos del presidente" Barack Obama.
Exactamente escribió: "Ese es el pequeño secreto sucio que muchos liberales han evitado decir en voz alta por miedo de ayudar a los enemigos del presidente en un momento en que la atención universal de la salud necesita todo el apoyo que podía conseguir. Pero la verdad es esto: Obamacare es horrible".
Para Moore, de 59 años, la nueva Ley de Asistencia Asequible tuvo un "comienzo difícil, con una planificación despistada, un mal sitio on line, y con el aumento de las tasas por parte de las compañías de seguros".
Moore, ganador de un Premio Oscar, sigue apostando por un sistema de gestión de gobierno y sostiene que el actual es muy favorable para la industria de seguros.
Sin embargo, en el mismo artículo el documentalista definió al ObamaCare como un "regalo del cielo", ya que sus protecciones impiden que las aseguradoras nieguen o dejar caer enfermos a los ciudadanos. Obamacare es, según Moore, mejor que nada en términos de reformar industria del cuidado de la salud de la nación, es mejor que nada para los que se enfrentaron a la pérdida de la cobertura.
Las políticas progresistas, consideró el cineasta, deben seguir luchando por una "asistencia sanitaria universal", similar a lo que Vermont implementará en el 2017 , dijo en su artículo de opinión.
Moore sabe de lo que habla: exploró el sistema de salud de EE.UU cuando hizo Sicko, filme estrenado el 29 de junio de 2007. La película ofrece una visión crítica del sistema de salud de ese país, poniendo énfasis en la crítica a las grandes compañías de servicios de salud estadounidenses y en las dificultades, para millones de estadounidenses para acceder a un sistema de salud de calidad y universal.
No es la primera vez que Moore critica al presidente Obama y otros gobernantes de su país.
Poco antes de las elecciones presidenciales de noviembre de 2012, cuando Obama fue reelecto presidente para un segundo mandato, Moore recordó que el mandatario "no cumplió con buena parte de sus promesas".
En aquel entonces, Moore se lanzó también contra el candidato repubicano Mitt Romney, a quien calificó como "un plutócrata republicano rico que ganó millones dejando gente sin trabajo".
En noviembre de 2012, el cineasta y periodista estadounidense señaló que no importaba quien ganara, ya que "el miércoles tu vida será la misma, sin cambios, sin importar quién sea el presidente".
"Tu hipoteca seguirá estando bajo agua, todavía deberás 50 mil dólares del préstamo estudiantil, tu hijo seguirá en Afganistán, tu hija continuará con dos trabajos para llegar a fin de mes y la nafta seguirá costando cuatro dólares".
El cineasta hizo de sus críticas al gobierno de turno una marca registrada. El presidente George W. Bush fue blanco de sus burlas y críticas durante años.
Moore logró un Premio Oscar por su documental "Bowling for Columbine", sobre la masacre de Columbine, colegio de Colorado donde dos alumnos mataron a disparos a 12 compañeros de escuela y un profesor (2002).
Al aceptar el Óscar, el cineasta generó gran polémica en Hollywood ya que fue el único ganador que aprovechó la oportunidad para denunciar públicamente al presidente George W. Bush por llevar a su país a "una guerra ficticia", al referirse a la invasión a Irak en 2003.
Luego, con su documental "Fahrenheit 9/11", el cineasta se refirió a los vínculos económicos de décadas entre la familia del presidente Bush, la familia real saudí y la familia Bin Laden.
Fuente: ANSA