Javier Milei ajustó el gasto público un 31 por ciento los primeros nueve meses del año respecto al del 2023. La motosierra fue implacable con todas las reparticiones salvo la Presidencia de la Nación, que gastó un 57% más que hace un año debido a la incidencia de un notable incremento en el presupuesto ejecutado por la Secretaría de Inteligencia del Estado del orden del 217% interanual.
El Centro de Economía Política Argentina (CEPA), think tank del kirchnerismo que conducen Hernán Letcher y la diputada nacional Julia Strada, presentó los datos de la ejecución presupuestaria de la administración pública nacional desde enero hasta septiembre. La gestión del ajuste implicó recortes fuertes del gasto en la Superintendencia de Servicios de Salud (-67%), la ANMAT (-19%), los hospitales (-29%), la Agencia Nacional de Discapacidad (-15%) y la ANSES (-18,2%).
Además de la SIDE, gastaron más que el año pasado la Cancillería (2,8%) y el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas (18,6%). El resto de las reparticiones dispusieron menos fondos que en 2023.
El Ministerio de Capital Humano ejecutó el ajuste más importante por su incidencia en el total con una reducción interanual del gasto del 27%. La cartera abarca a los ex ministerios de Educación (-52%); Trabajo (-65%) y Desarrollo Social (-60%).
Son impactantes también las caídas de los recursos ejecutados por los ministerios de Infraestructura (-74%) e Interior (-68%), en el que se incluye las partidas de asistencia a provincias y municipios, como en los destinados a las Obligaciones del Tesoro (-48%).
No se salvaron del ajuste la Procuración del Tesoro (-23%), la Defensoría General (-12%), la Auditoría General (-14%) y la Defensoría del Pueblo de la Nación (-27%). Tampoco las cámaras de senadores (-29%) y diputados (-35%) ni la Unidad de Información Financiera (-23%).
Distribución del gasto
La Seguridad Social explicó el 51% del total del gasto público nacional desde enero hasta septiembre, mientras que los Servicios de Deuda Pública fueron el segundo destino más demandante de fondos públicos nacionales acaparando el 12% del total.
Les siguieron por el tamaño de la participación en la distribución presupuestaria: Energía con el 9%, Educación y Cultura (5%), Promoción Social (3%), Salud (4%), Transporte (3%). El resto de las funciones sumadas reunieron el 16% restante.
