Partidazo, por donde se lo mire. En Liniers, Vélez y Newell's protagonizaron un choque que lejos estuvo de las noches de cuchillo entre los dientes de la Copa Libertadores y que sí se acercó a un ida y vuelta con chances al por mayor y buenos pasajes de fútbol. Con una intensidad que no se detuvo a lo largo de los 90 minutos, y ante los ojos de Alejandro Sabella, brindaron un espectáculo que terminó con la clasificación de Newell's a cuartos de final, tras el triunfo por 2-1 (Casco y Scocco; descontó Ferreyra) ante el local.
Tras la derrota por 1-0 en Rosario, los de Martino lograron revertir el marcador. Algo que era un aliciente extra para para un grupo de jugadores que jamás se da por vencido. Pelea en tres frentes -torneo Final, Copa Argentina y Libertadores- con las mismas energías y casi los mismos nombres. Y su entrenador está dispuesto a sacarle al plantel rojinegro hasta la última gota de sudor.
Tras un primer tiempo en el que Newell's pudo hacer la diferencia, Maxi Rodríguez le perdonó la vida a Vélez en los primeros minutos de la segunda parte, cuando definió cruzado y la pelota se perdió al costado del palo izquierdo del arquero de Vélez. Después, reaccionó Vélez, que acorraló a los leprosos y se dispuso a jugar de contra. Así también se lo perdió Scocco, cuando no pudo definir bien ante la salida de Sosa.
Pero tanto fue el Fortín en la búsqueda de un descuento, que Facundo Ferreyra logró finalmente el 2-1 que puso el suspenso en los últimos cinco minutos del partido, ya que un empate le daba la clasificación a cuartos a Vélez. Sin claridad, y con los de Martino bien parados en la última línea, los minutos se consumieron al ritmo del caos en el área visitante, producto de un Vélez que sólo acumuló gente de ataque. El pitazo marcó el final de una serie que quedará guardada entre las mejores del año y le dio la clasificación a los rosarinos, que siguen en la pelea en todos los frentes y sueñan en grande.
Los goles
Fuente: Cancha Llena