La noche del jueves estuvo marcada por un violento operativo policial que terminó con 13 detenidos, entre ellos el periodista Bautista Franco y el vocero cultural Santiago Algoberro, quien también estaba haciendo un registro periodístico de la protesta. Ambos fueron liberados a media mañana sin imputación.
Franco estaba con su credencial de periodista colgada del pecho: aún así fue gaseado y golpeado por la Policía
La Policía de Alfredo Cornejo reprimió una protesta contra la mineria desde el frente de las instalaciones del Canal 9, en la Calle Garibaldi, hasta la Peatonal de la ciudad de Mendoza. Las fuerzas de seguridad reaccionaron con una desproporcionada violencia contra los manifestantes que expresaban su repudio al medio de comunicación, acusándolo de operar a favor de la política gubernamental que promueve la explotación minera en la Cordillera de Los Andes.
Al salir del calabozo del Polo Judicial, Franco reveló que durante la protesta llevaba colgada su credencial de periodista. "Me gasearon dos veces y me golpearon", señaló. La Asamblea Mendocina por el Agua Pura denunció la criminalización de la protesta y exigió la liberación inmediata de los arrestados. Lo propio hizo el Sindicato de prensa con un comunicado en redes denunciando "la violación a la libertad de expresión".
Un operativo desproporcionado
La protesta contra el avance de la megaminería en Mendoza, convocada bajo el lema “El agua de Mendoza no se negocia”, se replicó en Uspallata, el Km 0 de Ciudad y otros puntos de la provincia. El “ruidazo” en el centro mendocino derivó en un operativo policial desmesurado: gases lacrimógenos, balas de goma y un cordón que arrinconó a los manifestantes sobre calle San Martín.
La Asamblea Mendocina por el Agua Pura (AMPAP) repudió lo ocurrido y difundió la lista de detenidos, entre ellos los hermanos Facundo, Renzo y Adrián Gollano, conocidos por su militancia ambiental, además de Franco y Algoberro. La Correpi y otras entidades sociales reclamaron su “inmediata e incondicional liberación” y garantías para su integridad física y psíquica.
La captura de los periodistas
Entre los detenidos se encontraban Bautista Franco, periodista de Minuto Uno, y Santiago Algoberro, vocero de los trabajadores de la literatura en Mendoza. Ambos realizaban tareas de relevamiento periodístico al momento de ser capturados.
Franco llevaba su credencial colgada en el pecho, confirmó su abogado Maximiliano Villarreal, aunque fuentes oficiales alegaron que “no era oficial”. “Nos identificamos como periodistas en todo momento y nos echaban gas. Nosotros no nos movimos, está registrado. En un momento nos pegan y nos detienen. Este tipo de comportamiento con la prensa que se identifica afecta la libertad de prensa y la libertad de expresión, es muy triste. Tenemos miedo de que cuando nos incorporemos a nuestro trabajo suframos alguna represalia”, denunció Franco tras recuperar la libertad.
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El periodista alcanzó a registrar imágenes del operativo antes de ser reducido. “Yo estoy filmando y nunca dejé de filmar, en el trabajo uno está acostumbrado a situaciones de violencia. Uno aguanta los empujones. Te quedás quieto y seguís haciendo tu trabajo. Me gasearon dos o tres veces, estoy triste y preocupado por el trabajo que es lo que nos da de comer”, agregó.
Heridos y hospitalizados
El operativo dejó al menos siete lesionados, atendidos en el Hospital Carrillo. Entre ellos figuran Luis Pinti, Francis Muñoz Coll, Máximo Alexis Astorga y Daniel Orlando Puebla, según confirmó Enrique Jasid, abogado del CeProDH.
Franco relató sobre sus compañeros de calabozo: “Hay chicos que están muy heridos y los están revisando, hay otros que están bien, sanos”.
Antecedentes de persecución
La represión del jueves se suma a una serie de antecedentes de persecución contra militantes ambientales. Facundo Gollano ya había sido detenido en agosto tras una marcha contra San Jorge, acusado de “daño agravado” por la declaración de cuatro policías. Pasó cuatro noches en el calabozo de Estrada antes de ser liberado. Su hermano Renzo fue arrestado semanas después en un confuso episodio policial.
La detención de los tres integrantes de la familia Gollano —los hermanos Facundo, Renzo y su padre, Adrián— refuerza las denuncias de criminalización hacia quienes ejercen la defensa del agua y los derechos ambientales.
Repudio sindical y social
El Sindicato de Prensa de Mendoza emitió un comunicado de repudio, denunciando la vulneración de la libertad de prensa y la criminalización de quienes registran la protesta social. Organizaciones sociales y ambientales reiteraron que la represión busca desalentar la movilización contra el avance de la megaminería en la provincia.
