Oficialismo y oposición. Cambiemos se desplegó con sus fuerzas de punta a punta de la agenda. Los aliados para la conquista de la Casa Rosada ofrendaron una demostración en torno al protocolo para el uso de las armas policiales, de Patricia Bullrich.
Ninguna voz de la oposición política tuvo más volumen que la de Elisa Carrió, fundadora junto a Mauricio Macri de la coalición que gobierna, contra la resolución ministerial que flexibiliza la actuación con poder letal de la policía.
La diputada nacional expuso que la vía Bullrich viola los derechos humanos a la vez que configura un corrimiento al "fascismo" del gobierno. Con dos intervenciones en Twitter, Carrió corrió las piezas del tablero macrista, aunque de a poco el presidente fue reacomodando la jugada del lado de Bullrich.
El paso siguiente de Carrió fue pedirle públicamente a Macri que mande el protocolo con la Doctrina Chocobar al Congreso. Al mismo tiempo, les escribió a "las fuerza de seguridad y policiales federales" para explicarles su postura.
