A la misma vez que dijo que se va a tomar más tiempo para convocar la elecciones provinciales, el mandatario ratificó que convocará a la Asamblea Constituyente sin plebiscitar la necesidad de reforma.
El gobernador Francisco Pérez contraatacó para confirmar de que por nada del mundo se va a bajar de la campaña electoral; ni siquiera va a correrse un centímetro del centro de la escena hasta el 27 de octubre. Este lunes volvió a sacar la reforma de la Constitución y a poner por delante de todo el peronismo a la presidenta Cristina Fernández.
Todo lo contrario a lo que desea el vicegobernador Carlos Ciurca, quien está el frente del armado de la campaña electoral de la lista que lleva como candidatos a Alejandro Abraham y Omar Félix. Ciurca instaló el viernes que la figura nacional de la campaña mendocina sería el gobernador Daniel Scioli, contra lo que Pérez replicó este lunes que está operando personalmente el desembarco de la presidenta Cristina Fernández en la provincia antes de las elecciones generales del 27 de octubre.
Juegan a la política, se cruzan chicanas y se divierten con las idas y vueltas que obligan a dar a los periodistas que les creen a los dos políticos con más poder hoy en la provincia. Pérez domina el Ejecutivo y Ciurca el Partido Justicialista. Entre ellos, "todo bien", dicen, salvo porque tienen objetivos y estrategias opuestas. El segundo del Gobierno se ganó en las internas su poder partidario, frente a un extraño armado auspiciado por el gobernador que perdió en todos los departamentos que se presentó, en asocio con el sector azul, del Chueco Mazzón, y el de los sanrafaelinos Omar y Emir Félix.
La operación Scioli presidente
Ciurca consiguió que el diario Uno pusiera el sábado de título principal en su tapa que Cristina no venía en la campaña. La noticia pereció en dos días, porque el gobernador desmintió al vice y desacreditó a matutino de Vila y Manzano. Pérez les dijo a todos los que quieran escuchar que está para gobernar y que va a hacer lo que considere para sostener el poder hasta el final de su mandato. Ciurca se imagina más fuerte después de las elecciones, porque Pérez no tiene reelección y el candidato a sucederlo con el poder del partido (Ciurca) es Rubén Miranda.
Pérez no dejó pasar el tiempo para reaccionar, otra vez. "Probablemente venga antes de octubre la presidenta. Hemos acercado la agenda de inauguraciones al doctor (Oscar) Parrilli, el dueño de la agenda presidencial, para acordar una fecha".
El gobernador ya había tenido que salir a confrontar sin que se notara tanto con el ciurquismo cuando le voltearon al gurú de su marketing de la campaña de Abraham y Félix. Mario Riorda salió eyectado porque Ciurca quería una campaña para los candidatos no para salvar la imagen del gobernador, como sugirió el cotizado consultor, quien había planificado centrar la comunicación proselitista en los logros del gobierno provincial y la influencia de Cristina Fernández para que se concretaran.
El jefe del Senado tenía otros planes. Potenciar al peronismo del aparato, el preexistente a los grupos kirchneristas que se sumaron en los últimos años. Ciurca ya eligió a Scioli para 2015, mientras el kirchnerismo espera saber qué dice Cristina. En la transición pos salida anticipada del gobierno de Fernando De La Rúa, Ciurca fue uno de los primeros y de los pocos que se encolumnó en la carrera presidencial del entonces desconocido Néstor Kirchner.
El viernes el vice confesó a los medios su romance con Scioli -según el diario El Sol, el vice mendocino ya fue designado por el gobernador bonaerense como jefe de su campaña presidencial en Mendoza- con lo que reforzó el operativo despegue del kirchnerismo puro.
Audio de la rueda de prensa de Francisco Pérez en Las Heras
La contraofensiva con la reforma de la Constitución
El lunes en la mañana, en territorio ciurquista, Pérez cambió la dirección de la bocha de la campaña con una apuesta más fuerte que después de la volteada de Riorda. No sólo introdujo a la Presidenta directamente en la campaña mendocina anunciando que hará lo posible por traerla a un acto con los candidatos, sino que desarrolló su idea para conseguir la posibilidad de reelección, contraria a los planes de Ciurca y La Corriente, el grupo político del peronismo que ganó la interna partidaria, con el vicegobernador, Abraham y Rubén Miranda a la cabeza.
Pérez fue el lunes a recorrer el parque industrial de Las Heras y cuando la periodista Marisa Carrizo, de LV10, le preguntó si iba a convocar a elección de constituyentes por decreto gobernador arrancó con moderación y más tarde confirmó que está decidido a avanzar con la reforma constitucional por decreto. "Se va a discutir en sus momento, no hay que mezclar las cosas", advirtió de entrada.
Y a renglón seguido ensayó la siguiente explicación de su estrategia: "La Constitución no se reforma desde 1916, nosotros queremos reformarla, lo hemos dicho siempre, vamos a insistir, vamos a sacar un decreto, no solo de la reforma de la Constitución, sino también queremos adherir a lo que planteó el radicalismo, del proyecto de (Néstor) Parés, de la reelección por única vez de los intendentes, como también queremos discutir legislativamente que las PASO no sean solamente para la categoría nacional sino para todas las categorías de la provincia".
Y agregó: "Todo esto es propio de una reforma política que tiene que estar separada del acto eleccionario porque sino se confunde y se presta a estar discutiendo siempre la cuestión coyuntural y la cuestión chiquita y darle letra a aquellos que no tienen ni ideas ni proyectos ni consolidación partidaria a que confundan más a la sociedad, entonces nosotros lo vamos a dejar al margen de lo que tiene que ver con las PASO".
La estrategia de Pérez para conseguir la posibilidad de ser candidato a un segundo mandato está cuestionada desde la Justicia y también desde la política. Es que para gambetear la falta de votos en la Legislatura para aprobar el plebiscito de necesidad de reforma requerido por la propia la Constitución, el gobernador apelará a la consulta popular que se realizó durante el gobierno de Roberto Iglesias y que no consiguió los votos que exige la jurisprudencia de la Suprema Corte de Mendoza en la materia, por lo que el radical abortó su proyecto reeleccionista tras conocer el resultado.