"La primera amenaza es Irán y la segunda Corea [del Norte]", declaró Thomas Countryman, secretario adjunto de Seguridad Internacional y No proliferación de Estados Unidos, a una agencia.
Un alto funcionario de Estados Unidos ha asegurado que Irán es la primera amenaza nuclear para el mundo y Corea del Norte, la segunda. Además, ha acusado a Teherán y a Pyongyang de contar con canales para importar y exportar material armamentístico.
Thomas Countryman, secretario adjunto de Seguridad Internacional y No proliferación de Estados Unidos, aseguró a la agencia Reuters que ambos países cooperan en materia nuclear y son una amenaza.
"Si me pides que las ordene jerárquicamente, la primera amenaza es Irán y la segunda Corea [del Norte]", señaló el alto funcionario.
Asimismo, Countryman acusó a Irán y a Corea del Norte de tratar de obtener materiales de alta tecnología vinculados a sus programas armamentísticos, saltándose las sanciones de la ONU que lo prohíben.
Ambos países "han desarrollado canales que les permiten seguir exportando e importando lo que necesitan para su industria armamentística”, afirmó Thomas Countryman, secretario adjunto de Seguridad Internacional y No proliferación de Estados Unidos.
Según Countryman, este tipo de actividades viola las sanciones de la ONU que “prohíben a Irán y Corea del Norte la importación de misiles nucleares y otros materiales de alta tecnología”, así como las exportaciones de “cualquier forma de material militar” desde esos países.
Corea del Norte e Irán han cooperado en el desarrollo de tecnología de misiles balísticos durante casi tres décadas. Sin embargo, existe la preocupación de que ambos Estados también estén colaborando en el campo de la tecnología nuclear y en la producción de misiles de otros tipos.
La ONU endureció las sanciones contra Pyongyang después de que Corea del Norte desafiara las advertencias internacionales y llevara a cabo un ensayo nuclear subterráneo el pasado 12 de febrero. Poco después de dicha prueba, Irán instó a la destrucción de "todas las armas de destrucción masiva y atómicas" del mundo.
Pese a todo, Occidente insiste en que Irán está desarrollando armas atómicas y algunos expertos temen que el país esté produciendo uranio enriquecido al 20%, lo suficiente como para crear una bomba en cuestión de meses. Pese a que el país persa niega estas acusaciones argumentando que necesita el programa nuclear para fines pacíficos de generación de energía eléctrica e investigación médica, Occidente impuso sanciones contra el sector bancario, energético e industrial de Teherán.
Countryman realizó estas declaraciones en una rueda de prensa tras una ronda de conversaciones en el marco del encuentro anual preparatorio de la conferencia quinquenal de los Estados miembros del Tratado de No Proliferación Nuclear.
Fuente: RT