Irrigación dejó de lado los peligros de los canales con agua en las Fiestas para no cortar el riego de las fincas, salvo en las servidas por el Río Tunuyán Inferior. El organismo del agua decidió este año, a contramano de la tradición, que los ríos y canales lleven agua nomalmente durante las festividades de fin de año.
La corta de Navidad y Año Nuevo se impuso debido a la cantidad de muertes que ocurrían en los cauces durante las clásicas celebraciones. Está prohibido bañarse en los ríos y canales, pero esa norma es de imposible aplicación porque ningún organismo del Estado sería capaz de controlar la inmensidad del sistema de riego de Mendoza.
El ente del agua informó que "debido a la emergencia hídrica, y por pedido de los regantes, Irrigación no interrumpirá la dotación del sistema hídrico. Solicitan precaución para evitar accidentes".
A diferencia de años anteriores, el Departamento General de Irrigación anunció que no interrumpirá la dotación de las principales ramas del sistema hídrico provincial. Esto se debe a un pedido de los regantes de los ríos Malargüe, Atuel, Diamante, Tunuyán Superior y Mendoza, quienes requieren mantener el riego en sus propiedades.
Únicamente se realizará corta en el Río Tunuyán Inferior, desde el 23 de diciembre hasta el 5 de enero, situación que fue consensuada con inspectores y regantes, agregó la comunicación oficial de Irrigación.
El ente del agua solicitó que la gente no utilice los cauces para bañarse y que tengan precaución al circular cerca de la red hídrica.
Otra cuestión que tuvo en cuenta Irrigación en sus pedidos a la población es la basura que va a parar a los canales. "Debido a que durante los asuetos estará restringido el servicio de recolección de residuos, desde Irrigación apelan a la buena voluntad de los mendocinos solicitando que no arrojen basura en los cauces ni espacios públicos", dice la comunicación.
Y la lista de advertencias ofciales se completó con presuntas respuestas a un posible accidente climático: "Es importante considerar que, en caso de tormentas, los canales podrían desbordarse por el exceso de basura acumulada. Además, el agua que corre por el sistema hídrico riega los alimentos que luego llegan a las mesas de todos los mendocinos. Por estas razones, es importante comprender el alto riesgo que conlleva contaminar los cauces".