El argentino Kevin Hoistacher, de 24 años, quien fue detenido en la frontera entre Rusia y Finlandia por tener medio gramo de marihuana dentro de una caja de cigarrillos, obtuvo la concesión de la prisión domiciliaria para poder dejar la prisión para esperar el juicio en un hotel. La Justicia de Moscú le concedió hoy arresto domiciliario mientras se lleva adelante el proceso en el que está acusado de contrabando de estupefacientes, una calificación absurda frente a las pruebas presentadas en la causa.
Así lo informó el abogado de la familia de Hoistacher, Fernando Soto, quien dijo que en una audiencia realizada esta mañana la Justicia le concedió este beneficio, por lo que el joven deberá residir en un hotel de Rusia mientras sigue adelante el proceso, bajo la garantía del cónsul argentino en ese país, que estuvo presente en el debate.
"Fue un poco complicada la vida pero por lo menos estoy vivo. Ya estoy en libertad. Gracias!!! a todas las personas que ayudaron. Estoy orgulloso de ser argentino", escribió en Facebook el argentino tras conocer la decisión de la Justicia rusa.
Hoistacher, de 24 años, fue detenido el 22 de julio en la ciudad de Vyborgla, en la frontera entre ese país y Finlandia, adonde volvía luego de dejar a un amigo en el aeropuerto de San Petersburgo. El joven llevaba medio gramo de marihuana. Los perros entrenados para detectar droga lo denunciaron. Fue detenido y terminó en una cárcel, incomunicado, sin derecho a comer ni bañarse todos los días y con la posibilidad real de recibir una condena de 3 a 7 años por tráfico de estupefacientes.
Tras una gran lucha por parte de su familia y con el apoyo del Consulado argentino en Rusia, se adelantó para este jueves la resolución de la prisión del joven, cuya fecha inicial era el 21 de septiembre.
La estrategia de la defensa era lograr que cambiaran la carátula de la causa. Kevin está acusado de "contrabando agravado" y su abogado pretendía que se lo acusara de "tenencia simple", lo que implicaría una pena máxima de seis meses, con la posibilidad de ser excarcelado con el pago de una fianza. Sin embargo, su pedido fue negado y su situación se complicaba cada vez más.
Ya con las cartas puestas sobre la mesa, no quedaba más que escuchar la sentencia y un último alegato. Lo cierto es que inesperadamente, la Justicia decidió liberarlo y Kevin, después de la pesadilla que vivió desde julio, quedó libre al fin.
Kevin rompió el silencio una vez liberado y, si bien no pudo brindar muchos detalles porque la investigación está en curso, contó sus sensaciones: "Estoy bien, disfrutando la libertad de nuevo", deslizó aunque aclaró: "No estoy completamente libre. Estoy con arresto domiciliario con tutela del cónsul argentino en Rusia".
"Me gustaría agradecer a todos por el apoyo. Ahora estoy en un hotel pagado por la embajada Argentina en Rusia, donde me quedo hasta el 15 de octubre que es cuando se va a dar la próxima audiencia", explicó.
Sobre su situación judicial, comentó: "Cada mes se puede prolongar un poco más. El 15 me dicen si puedo salir a mi casa en Finlandia o si se va a postergar. Estoy con mi familia que me dio un apoyo increíble y en un par de días viene mi novia".
Kevin también habló sobre su vida en la cárcel: "Estuve en el centro penitenciario de San Petersburgo y una semana en Viborg. No fue nada fácil, no es un hotel. Al principio estuve aislado y luego estuve con rusos y otros extranjeros. Me daban poco contacto. Fue un poco complicada la vida pero por lo menos estoy vivo y ahora quiero disfrutar la libertad y la naturaleza".
Además, manifestó que durante su estadía en prisión casi no pudo hablar con su familia: "No pude hablar con mi esposa todavía. Quiero saber como están todos en mi casa. No pude tener comunicaciones telefónicas, solo un par de visitas pero fueron muy complicadas porque tenía que hablar en ruso".
Y concluyó con una mención hacia Argentina: "Gracias a todo el pueblo y a los medios por preocuparse y tratar de ayudar".