Familiares de Florencia Magalí Morales se manifestaron en los tribunales de Villa Mercedes, San Luis, al cumplirse dos años de que esta joven mendocina fuera hallada ahorcada en un calabozo de la comisaría 25 de Santa Rosa de Conlara.
Florencia fue a esa dependencia policial porque conocía a uno de los uniformados. Su intención era reclamarle una tarjeta para comprar alimentos para sus hijos. Poco después la hallaron ahorcada en una celda. Como estaba en plena vigencia la cuarentena, la policía buscó instalar la versión de que había sido detenida por violar el aislamiento, pero luego se supo que ella había acudido por voluntad propia a la comisaría.
Informe Explicito: Florencia Morales, la mendocina que halló la muerte en un calabozo
Según resumió uno de los abogados de la familia, Federico Putelli, "en base a los elementos de prueba la perito concluyó que la causa de muerte es una asfixia mecánica por estrangulamiento" lo que dejaría afuera la teoría del suicidio y refuerza la hipótesis de un homicidio agravado "por la forma en que fue encontrado el cuerpo".
Por eso en diciembre de el año pasado los abogados de la familia y a la secretaría de Derechos Humanos de la Nación pidieron cambiar la carátula de la causa de "privación ilegítima de la libertad, apremios ilegales y mal desempeño de funcionario público” a femicidio.
Reynaldo Heraldo Clavero y Marcos Dionisio Ontiveros, jefes policiales detenidos por el crimen pasaron pocas horas tras las rejas.
El 4 de marzo se formó el Tribunal de Impugnaciones de Villa Mercedes que analizará la presentación. Está integrado por Hernán Herrera, Vilma Eguinoa y Sandra Ehrlich. Por esta razón la protesta se realizó en esa ciudad.