Tres artistas sanjuaninos se encargaron de ambas faenas. A la figura del prócer, sitio favorito para el proselitismo en San Juan, también le hicieron arreglos en el cabello y en la cara.
Un grupo de tres artistas y escenógrafos restauraron en las últimas horas la estatua de Domingo Faustino Sarmiento, que se encuentra en la puerta de su casa natal y que fuera atacada días atrás por uno o más desconocidos que le arrancaron a la estatua el libro de sus manos.
El libro ahora fue empotrado y atornillado. "Además se lo pintó y maquilló para que luciera más real", informó el sitio Tiempo de San Juan. Los encargados del trabajo fueron: Juan Carlos Martínez, Abel Martínez y Leonardo Varela.
La estatua de Sarmiento es aprovechada no sólo por turistas sino también por políticos que quieran posar para la posteridad como protectores de la educación, por eso se convirtió en un sitio de paso obligado para el proselitismo.
Ya que estaban los restauradores le dieron una pasadita a la estatua de un dinosaurio que se encuentra enfrente de la Casa de Sarmiento, en las oficinas de Turismo, y la reacondicionaron, todo por el mismo precio.