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El segundo día del juicio por encubrimiento del atentado terrorista a la AMIA culminó en los tribunales federales de Retiro, sin la presencia del expresidente Carlos Menem, procesado en la causa junto a otros doce imputados, ya que fue habilitado a seguir el trámite de la audiencia por videoconferencia a causa de su estado de salud.
La defensa de Menem había presentado la semana pasada, antes del inicio del enjuiciamiento, un certificado médico donde quedaba registro del "agravamiento" de su hipertensión arterial.
Quien sí estuvo en la sala presenciando la segunda jornada del juicio es el exjefe de la ex-SIDE, Hugo Anzorreguy, que el jueves pasado había estado ausente en la primera audiencia ante el Tribunal Oral Federal 2, ya que estaba internado en el sanatorio Otamendi.
La audiencia de este jueves tuvo como eje continuar con la lectura de los requerimientos de elevación a juicio oral y las acusaciones de las diferentes querellas.
Uno de los que leyó su acusación fue el excomisario bonaerense, Juan José Ribelli, quien denunció al destituido juez Juan José Galeano por haberlo sometido a prisión durante ocho años y medio a partir de la falsa acusación de haber estado involucrado en el atentado.
Previamente, se leyó el requerimiento de elevación a juicio de la querellas de Amigos y Familiares de víctimas del atentado, seguida de AMIA y DAIA, cuyo expresidente, Rubén Beraja, espera una sentencia por ser partícipe del encubrimiento.
Uno de los temas recurrentes fue la acusación por el abandono de la llamada "pista siria" por instrucción del gobierno menemista, con el propósito de alejar la investigación de personas de su entorno más íntimo, de quienes se sospecha.
Por el caso, se señalaron las conexiones del exmandatario con la familia de Alberto Kanoore Edul, que a su vez tenía relación con uno de los sospechosos de planear el atentado, el agregado cultural iraní Moshen Rabbani.
En respuesta a estas denuncias, la defensa de Menem planteó que la acusación se basa "en motivos políticos", y destacó que el exmandatario puso "todos los recursos del Estado para que la causa AMIA sea resuelta".
"Nada indica que Carlos Menem haya contactado a Kanoore Edul y pedido a Munir Menem que interceda en su favor ante el juez Galeano", expresó.
Por su parte, la AMIA y DAIA leyeron las acusaciones por el pago de 400.000 dólares a Carlos Telleldín, para que éste declarara públicamente la versión falsa de que había entregado la camioneta Trafic que se estrelló contra la sede mutual judía a los ex policías liderados por Ribelli, quien en este juicio pasó a ser querellante.
Fuente: Ámbito
