Rodolfo Suarez estableció algunas restricciones en gimnasios, restaurantes y templos en un intento, dijo, de bajar la curva de contagios y descomprimir el sistema sanitario, que tiene 90% de camas de terapia intensiva ocupadas en el Gran Mendoza.
"Si en 10 días la positividad sigue siendo alta vamos a tener que tomar otras medidas", advirtió el mandatario, quien dijo que esa medida podría ser el ASPO, es decir aislamiento riguroso.
Pese a la saturación de camas UTI, el gobernador aseguró que desde que se inició la pandemia su gestión "duplicó la cantidad de camas de Terapia Intensiva".
Entre otras medidas, Suarez anunció que el Hospital Carrillo se reconvertirá en "Hospital COVID", ya no tendrá atención pediátrica, que se derivará al Notti.
Además adelantó el cierre de clubes, que los gimnasios funcionarán al 30%, los restaurantes con mesas al aire libre de 4 comensales y las misas y cultos sólo con 10 asistentes.
"La cadena de contagios no se corta con normativas que dictemos nosotros. No hay normas que alcancen si no tenemos los cuidados y cumplimos con las normas que están apuntadas a aquellos casos donde vemos que se producen mayores contagios, que tienen que ver con lugares cerrados, y aquellos donde se están desarrollando actividades en contra de la normativa", remarcó el mandatario.
"La mayoría de los contagios se dan en reuniones sociales clandestinas, y cuando las personas vuelven a sus hogares afectan a la familia", sostuvo el gobernador.
Suarez remarcó que la COVID-19 ya no afecta sólo a los adultos mayores: "Están ingresando a terapia intensiva personas de 45 o 50 años".
⚠️El nuevo decreto afecta a la zona del Gran Mendoza en sus zonas urbanas, adelantó Suarez:
🔴"Vamos a continuar con el cierre de los bares"
🔴"Empezaremos fuertes operativos con la policía"— Periodismo Explícito (@SinMaripositas) September 1, 2020
