Trabajadores de la salud a los que el Estado mantiene en condiciones de trabajo precarias harán una huelga activa este lunes y martes en reclamo de aumento del 50% en un solo tramo, pases a planta de todos los que ingresaron en pandemia y el fin de los contratos basura en hospitales y centros de salud.
Estos trabajadores están nucleados en SITEA y en la asamblea de Trabajadores y trabajadoras autoconvocados del Hospital Central, y están en disconformidad con el acuerdo al que llegaron AMPROS y ATE con Rodolfo Suarez.
La semana pasada concretaron una huelga motorizada por enfermeros, personal de servicios críticos, entre otros.
En paralelo, este lunes habrá una asamblea de prestadores en el Notti, donde se evaluarán medidas a la espera de lo que resuelva una mesa negociadora del gremio de los profesionales con el Ejecutivo.
"Con los sueldos miserables del gobierno, con el maltrato a enfermería y el traslado arbitrario de personal calificado a otras áreas. Durante tres días los médicos de las terapias del central y otras instituciones de huelga activa", señaló la Asamblea del Central.
Los prestadores y contratados, muchos de los cuales están en Enfermería, o son camilleros, personal de guardia entre otros que están en le primera línea de batalla, están en las calles reclamando por su situación incluso antes de que se declarara la pandemia. A fines de 2019 comenzaron a explicitar la situación de precariedad que atraviesas, con salarios por debajo de la línea de pobreza.
Sin embargo, el gobierno de Rodolfo Suarez se mantuvo impasible ante los reclamos, negándoles la posibilidad de paritar e imponiéndoles por decreto magros aumentos que no les permiten llegar a fin de mes.