Trasladan a Argentina a un sacerdote involucrado en adopciones ilegales en Chile, pero para el Vaticano no corresponde un castigo canónico

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La Congregación de los Sagrados Corazones en Chile resolvió sancionar al cura Gerardo Joannon Rivera luego que éste se viera involucrado en dos casos de adopciones irregulares ocurridas en la década de los 80 y que fueron acreditadas en la investigación eclesiástica que llevó adelante el canonista salesiano David Albornoz.

Según confirmaron a Emol fuentes que conocieron la decisión de la comunidad, el castigo establece que el religioso, quien durante la etapa de sumario permaneció suspendido de sus funciones sacerdotales, deberá trasladarse hasta la residencia de la comunidad en Argentina.

Las mismas fuentes agregan que Joannon aceptó la medida, pero por "obediencia", descartando cualquier responsabilidad en los hechos que pesan en su contra ya que, a su juicio, es inocente.

La amonestación tiene relación con el resultado de la investigación interna que ordenó la congregación y que estableció la participación activa del cura en la entrega irregular de dos recién nacidos, específicamente las hijas de María Alicia Haussler y María Carolina Celedón, madre de la hija de Andrés Rillón nacida en febrero de 1983.

La amonestación tiene relación con el resultado de la investigación interna que ordenó la congregación y que estableció la participación activa del cura en la entrega irregular de dos recién nacidos, específicamente las hijas de María Alicia Haussler y María Carolina Celedón, madre de la hija de Andrés Rillón nacida en febrero de 1983.

La resolución fue acordada la última semana de enero en un retiro en Punta de Tralca al margen de lo resuelto por la Santa Sede días antes y que determinó que las faltas cometidas "no configuran delito canónico imputable a Joannon", ya que si bien estableció la ocurrencia de los hechos, éstos ya están prescritos.

El Vaticano, incluso, dejó las futuras decisiones relacionadas a la situación de Joannon "en el ámbito de la obediencia religiosa ordinaria al interior de la provincia chilena" y por ello, sería su congregación la que finalmente decidiese una posible sanción para el sacerdote.

Fuente: emol.com

 

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