El jueves en la noche un hombre de 29 años fue asesinado en el polideportivo Poliguay de Guaymallén, mientras se disputaba la final de Futsal entre el conjunto local y San Martín.
Alrededor de las 23:30, un grupo de 20 simpatizantes de Atlético Argentino, encapuchados, llegaron al lugar armados con el presunto objetivo de lograr obtener allí mismo las banderas de Independiente Rivadavia de Mendoza. En ese momento aparecieron, para hacerle frente, los barras del conjunto que milita por la B Nacional.
Así, comenzó un enfrentamiento que derivó en corridas. Los tranquilos espectadores huían para salvar su vida. Gustavo Enrique Pellegrina, de 29 años, fue asesinado de un disparo en la sien en medio de las corridas.
Los testigos del hecho llamaron a la Policía, que arribó cuando los violentos ya se habían retirado, por lo que no se registraron detenidos. Cuando la tragedia había dejado atrás las acciones violentas, llegó el Jefe de la Policía, Juan Carlos Caleri, a explicar lo que nadie previno.
En diálogo con Mdz radio, el funcionario policial dio pistas claras de la información que tenía la fuerza sobre el hecho: casi ninguna, más allá del relato de los espectadores atropellados por una patota. "La gente salió corriendo atemorizada del lugar, pero creo que hoy podemos conseguir más testigos que hayan visto y nos den más pistas que anoche, que todos se fueron atemorizados. Puede haber filmaciones y otras pistas. Apelo a los medios que le pidan a la gente que se presente a atestiguar, esto es un hecho sin precedentes", dijo Caleri.
Fuente: El Gráfico