"Todos los argentinos vinimos a solidarizarnos con el pueblo boliviano", dijo Cristina Fernández en Cochabamba, en donde se celebró una reunión de emergencia de la UNASUR para desagraviar al presidente Evo Morales, tras haber sido destratado por los gobiernos de Francia, Portugal, Italia y España "a pedido de la Casa Blanca", según denunció el mandatario víctima.
"La clara restricción que sufrió el presidente (Morales) lo convirtió en un rehén", remarcó la mandataria argentina durante un discurso pronunciado ante los presidentes Nicolás Maduro (Venezuela), Rafael Correa (Ecuador), José Mujica (Uruguay) y Dési Bouterse (Surinam), además de Morales, y cientos de bolivianos que se congregaron para apoyar la acción de la UNASUR.
"Si esto se hace a la luz de los ojos del mundo contra un jefe de Estado, qué es lo que no se hará contra un ciudadano común en cualquier lugar". Con esa frase, Cristina expresó su malestar e indignación por desvío ilegal del avión del presidente de Bolivia, Evo Morales, al arribar a la ciudad de Cochabamba para participar de la reunión convocada de urgencia por la Unión de Naciones Suramericanas.
"A usted, presidente de Bolivia, lo han tenido de rehén durante 13 horas y ahora quieren explicar que todo se debe a fallas técnicas o de combustible. Que pidan perdón, una vez en su vida, que pidan perdón por lo que han hecho", afirmó la Presidenta, durante un breve discurso que brindó en el Coliseo de la Coronilla.
El avión de Morales fue desviado y demorado, el martes en la noche, en Austria luego de que Francia, Portugal, Italia y España se negaran a permitirle usar su espacio aéreo por la sospecha (infundada) de que escondía al ex analista de la CIA Edward Snowden, a quien Estados Unidos acusa de espionaje.
"Es muy peligroso, es sumamente peligroso que quienes presumen de ser países con un altísimo grado de civilización y desarrollo cultural cometan actos de esta naturaleza contra jefes de estado", apuntó Cristina.
Enseguida agregó: "Venimos a solidarizarnos con su presidente y compañero Evo Morales y especialmente con el pueblo boliviano".
El insólito incidente diplomático generó una reacción en bloque de los líderes de América del Sur, que pidieron explicaciones a los países europeos que prohibieron a Morales sobrevolar su espacio aéreo.
"Resulta curioso cuanto menos que quienes muchas veces reclaman seguridad jurídica y quienes nos hablan del respeto al derecho internacional, con el cual todos estamos de acuerdo, hayan cometido esta inédita violación a las más elementales normas vigentes del derecho internacional", señaló la Presidenta.
La jefa del Estado arribó al aeropuerto de Cochabamba, en momentos en que el propio Morales desarrollaba allí mismo un duro discurso ante la presencia de varios de los presidentes de la Unasur.
El presidente boliviano se refirió en Cochabamba a su detención ilegal en Europa al regresar de una reunión en Moscú. "Sólo pueden revisar el avión de un delincuente y yo no lo soy", sostuvo.
Los presidentes sesionaron en un hotel del centro de Cochabamba para emitir una declaración de respaldo a Morales y analizar la situación diplomática generada por el impedimento de España, Francia, Italia y Portugal para que el avión presidencial boliviano sobrevolara sus territorios.
El acto en el Coliseo de la Coronilla comenzó minutos después de las 17 (las 18 en la Argentina) y tuvo como primeros oradores al gobernador de Cochabamba, Edmundo Novillo, y a dirigentes de la Confederación Nacional de Juntas Vecinales, el sindicato de trabajadores petroleros y la Confederación de Campesinos.
