Alberto Fernández y los ministros de Salud, Carla Vizzotti, y de Educación, Jaime Perczyk, presentaron “Aula Segura”, el “protocolo para la prevención y control de Covid-19 en establecimientos educativos de los niveles inicial, primario y secundario”.
A diferencia de lo ocurrido en plena ola de contagios y decesos de 2020 y 2021, en principio, el Gobierno de Mendoza anticipó respetará todos los puntos.
Durante los momentos más crudos de la expansión del virus, el Ejecutivo mendocino mostró resistencia a las resoluciones nacionales. Llamó a la presencialidad cuando aún no había campaña de vacunación e incluso Rodolfo Suarez lo planteó como batalla política y personal, como lo destacó en su discurso en la Asamblea Legislativa en mayo de 2021.
Con el invierno azotando con crueldad la geografía provincial, y la necesidad de mantener ventilados los ambientes, el Gobierno incluso ordenó que los padres mandaran a los niños a las aulas "con mantas, infusiones y azúcar", en una pelea por diferenciarse de los resguardos que se buscaron desde el Gobierno Nacional ante el impacto del virus.
Con el avance de la vacunación, y la merma de muertes, la Nación finalmente ablandó los protocolos en las aulas.
“Tenemos un desafío para el inicio de ciclo lectivo que lo vamos a encarar como hasta ahora, evaluando la evidencia científica, dialogando y mirando para adelante", aseguró la ministra de Salud Vizzotti durante el acto que se llevó a cabo en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada.
En tanto, José Thomas, titular de la DGE, señaló: “Hemos quedado muy conformes con el protocolo, y ahora nos queda trabajar con el equipo de Mendoza para determinar si hacemos algunos retoques jurisdiccionales o arrancamos el ciclo lectivo 2022 con las pautas que se definieron”.
Protocolo en vacunados y no vacunados
“En cuanto a los contagios, vamos a actuar como se hace en la población en general entre los vacunados y no vacunados. En caso de que algún alumno o docente resulte positivo, se tendrá que aislar siete días, mientras que si no están vacunados, el tiempo de aislamiento será de diez días. En caso de contactos estrechos asintomáticos que tengan el esquema completo, no va a requerir que se aíslen salvo que aparezca sintomatología”, señaló a su turno la ministra de Salud de Mendoza, Ana María Nadal.
Agregó: “Los números de vacunación que tenemos en los niños, niñas y adolescentes son muy buenos. El grupo de 3 a 11 años alcanzó un 70% de inoculación con una dosis, y el grupo de 12 a 17 años, 86% también con primera dosis. Este gran avance es uno de los ejes centrales”.
Cómo será la vuelta a clases
- Las escuelas deberán recabar la información sobre la vacunación contra COVID-19 de toda la comunidad educativa, así como la del calendario nacional.
- Se eliminan las burbujas.
- Asistencia cuidada: ante la presencia de síntomas o malestar general-asociado o no a COVID-19-, el personal y los alumnos no deben acudir a las escuelas y deben permanecer en aislamiento siguiendo los criterios vigentes. Se recomienda que realicen la consulta médica correspondiente.
- Quien presente síntomas que no sean compatibles con COVID-19, luego de 24 horas sin ellos, puede volver a la escuela.
- Ante la presencia de casos de COVID-19 se debe cumplir el aislamiento previsto, así como las medidas ante contactos estrechos según condición de vacunación.
- La sospecha y confirmación de casos no implica necesariamente el cierre del aula ni la interrupción de las clases presenciales.
- Uso obligatorio de barbijo a partir del Nivel Primario: debe tapar nariz, boca y mentón, bien ajustado a la cara y durante toda la jornada educativa en espacios cerrados.
- La ventilación debe ser cruzada y constante.
- Higienizar y limpiar regularmente los ambientes y mantener una adecuada higiene de manos.
- Priorizar la distancia en los momentos en que no se utilice barbijo.
- Se sospechará de un brote de COVID-19 en el aula en presencia de al menos tres casos confirmados entre alumnos/as de una misma aula -o alumnos y docente, para el caso de docentes permanentes- asociados epidemiológicamente, en un período igual o inferior a siete días.
- Se promoverá el estudio etiológico de los brotes (confirmar los primeros casos con pruebas de laboratorio y los casos asociados por nexo epidemiológico) para identificar el riesgo de transmisión.
- En ese caso se notificará a los familiares de los estudiantes y al personal relacionado al aula.
- Frente a sospechas de brotes, la autoridad sanitaria realizará la evaluación de riesgo pertinente y se encargará de definir junto a las autoridades educativas las medidas a adoptar.