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El presidente Mauricio Macri retó a los futbolistas de Boca y River sin nombrarlos desde un acto celebrado este jueves en una viña de un pequeño productor de Las Heras, en Mendoza, con motivo del anuncio de un subsidio para millones de litros de vino que no tienen mercado.
En esta provincia está programado un Superclásico comercial del paquete de verano que transmite Fox Sports con la producción y organización de Torneos, la compañía que perdió el CEO, Alejandro Burzaco, en manos de la Justicia de Estados Unidos, que resolvió apresarlo por corrupción.
Macri le dedicó el 20% del tiempo total del discurso desde Mendoza a la cuestión futbolística antes de enlazar directamente con el narcotráfico y la unidad de los argentinos.
Con gesto de enojo, Macri pidió "que se vea en la cancha algo que tenga que ver con el deporte, no lo que vimos el sábado pasado, que fue cualquier cosa menos eso en un momento en cual estamos todos comprometidos a tener una Argentina se revalorice la importancia del diálogo de la buena convivencia donde bajemos la violencia".
El presidente se refería al partido que River le ganó a Boca en Mar del Plata, con cinco expulsados en total y una batahola antes del final del partido con trompadas y empujones de los futbolistas.
Antes de llevar el Superclásico a su discurso del diálogo y contra el narcotráfico, el presidente le pidió a Cornejo que haga lo necesario para que Boca gane el sábado en Mendoza, porque en "San Juan siempre ganamos", en una chanza que derivó en el narcotráfico sin solución de continuidad.
