Contra múltiples pronósticos que anticipaban la imposibilidad de desarrollar un vehículo en la provincia para justificar la importación por montos millonarios de trolebuses viejos y gastados en otras ciudades del mundo, la Empresa Provincial de Trolebuses desarrolló el primer modelo argentino de ese tipo de vehículos destinados al transporte público. Un prototipo del trole con tecnología desarrollada en la provincia, aunque carrozado en Buenos Aires por la inexistencia de fábricas en Mendoza, se presentó en los desfiles de carros de la Fiesta de la Vendimia.
Según el anuncio de la empresa, en los próximos días el vehículo exhibido debería estar transportando pasajeros de los recorridos de la línea T, pero lo más importante es que se proyecta la fabricación en serie de los troles mendocinos para ir renovando la añeja flota existente en la EPTM. La sigla de empresa pública provincial luce en la parte trasera y en el frente del prototipo para que no queden dudas de que el vehículo es auténticamente mendocino.
"La idea se desarrolló con elementos y recurso humano propios que es lo importante en este proyecto. Técnicos y personal trabajaron para poder desarrollar el trolebús en la medida de las necesidades de la empresa. Esto busca brindar el servicio con ciertas especificaciones técnicas, distintas a los coches a los que nosotros estamos acostumbrados", explicó Federico Sandoval, director de la EPTM en una entrevista para el portal de prensa del Gobierno de Mendoza.
"Que las unidades utilizadas hayan sido siempre de origen extranjero nos ha traído problemas técnicos para poder brindar el servicio con normalidad porque no tienen la resistencia que necesitan para las calles de Mendoza. Con este nuevo vehículo esperamos no tener ese inconveniente y poder brindar un mejor servicio a corto plazo", agregó el funcionario.
El parque automotor de la EPTM tiene actualmente una antigüedad promedio superior a los 30 años, una condición que perjudica la presatación del servicio sumada a las dificultades de adaptación que presentan los troles importados cuando son rodados en las calles de Mendoza, entre las que la inestabilidad de los brazos que toman la energía del cableado público es una de las más evidentes porque genera que se paren los vehículos y que los conductores deban dejar el volante y calzarse guantes para arreglar el problema, todo a la vista de transeúntes y pasajeros.
Francisco Lozada, otro director de la EPTM, remarcó que a la hora de encarar el desarrollo de un trole mendocinos "se tomaron dos definiciones técnicas que también son políticas. El vehículo tenía que estar dotado al menos de dos cuestiones que son irrenunciables para lo que es la política de la empresa a futuro: tener el piso bajo, para permitir el acceso con facilidad, y la otra es que tenía que tener aire acondicionado. La idea reúne algunas características de confort básicas en la era moderna".
El directivo de la empresa pública especificó que "la unidad tiene una capacidad de aproximadamente 80 pasajeros y la concepción tecnológica es la de un trolebús de última generación con una mezcla de tecnología de punta con las necesidades de nuestras prestaciones de servicio. El trolebús tiene que tener una resistencia determinada para nuestras calles y tiene que contar con una determinada dureza y rigidez (para soportar hasta 80 pasajeros, como viajan en los troles de Mendoza) que en los vehículos importados no conseguimos".
Lozada estimó que el costo de producción del trole mendocino rondará entre 200 y 210 mil dólares por unidad, mientras que los importados usados a los que se acostumbró la provincia cuestan entre 250 y 300 mil dólares. "Estamos hablando de un vehículo usado que no cumple con los estándares de calidad que hemos puesto, es decir que sea de piso bajo y tenga aire acondicionado", advirtió el funcionario. Con todo eso, contó que "hay algunos vehículos importados que cuestan hasta un millón de dólares o más".
Sandoval adelantó que "si el proyecto sigue bien y sale todo como esperamos, la idea es poder ir renovando el parque móvil de trolebuses a un ritmo de 8 a 10 unidades por año. Como empleados el sentimiento sería primero un orgullo muy grande y segundo la conformidad de poder brindarle a los mendocinos el servicio que realmente se merecen, teniendo un parque móvil nuevo". El director agregó que "esto deriva del cálculo de incorporar 8 o 10 trolebuses por año; así, en 3 o en 4 años tendríamos una flota total de trolebuses nueva con 3 años de antigüedad, comparada a la que estamos acostumbrados a utilizar que no es menor de 30 años. Creo que vamos a poder disfrutar de un servicio de excelencia".
Fabricación en serie
Sobre la continuidad del proyecto para pasar del prototipo que se consiguió a la disponibilidad de unidades para el servicio local y también para vender a otras provincias y países que utilizan este tipo de vehículos para transportar pasajeros, Lozada se entusiasmó con las serias posibilidades de fabricar los troles mendocinos en serie, aunque ese paso se daría en asocio con una fábrica privada.
"La idea es llegar a estandarizar la empresa con el prototipo. Pensamos que esto se va a fabricar en serie. De hecho ya hemos pedido una partida presupuestaria para empezar a buscar la fabricación en serie. Pero también existen intereses de otras provincias. Esto es real, nos ha llamado gente de Córdoba y Rosario, que son las otras dos ciudades en las que circulan trolebuses, interesadas en este desarrollo. Si mañana se vende para afuera, mejor todavía", enfatizó Lozada.
Y no se quedó en eso, también desarrolló la posibilidad de exportar troles de Mendoza a otros países. "Se podría por ejemplo a Chile, en Valparaíso tienen trolebuses. A Ecuador, Quito es una de las ciudades de las más importantes de Sudamérica que cuentan con este servicio. La cantidad de ciudades a las que se puede llegar a exportar son muchas pero la idea siempre ha sido pensada para cubrir las necesidades de nuestra empresa. Podemos decir que es un producto pensado para nosotros, para los mendocinos pero que puede llegar a tener una producción muy grande", remató.