Por Diego Durruty
Para Corsa
La cuarta fecha del torneo 2015/2016 de la Fórmula E, que se realizó en el callejero de Puerto Madero, en la Ciudad de Buenos Aires, fue ganado por Sam Bird, quien con este resultado le dio el primer éxito en la divisional al DS Virgin Racing.
El inglés comenzó el sábado de gran forma tras quedarse con la pole position y luego dominó de punta a punta la carrera pese a la presión final del suizo Sebastien Buemi (Renault e.dams), quien largó desde la última posición debido a una clasificación complicada.
La primera parte de la competencia careció de emociones ya que Bird no tuvo inconvenientes para controlar al francés Nico Prost (Renault e.dams) y al portugués Antonio Felix Da Costa (Team Aguri), sus escoltas durante los giros iniciales.
Pero todo cambió cuando los pilotos se subieron al segundo auto para completar las 35 vueltas del ePrix porteño. Bird aprovechó la ventaja que tenía para mantenerse en la vanguardia y tuvo un resto de energía para defenderse de Buemi, quien se vino como una tromba después de superar al brasileño Lucas Di Grassi (Abt Shaeffler Audi Sport).
Con el dos por ciento de su batería en la vuelta final, Bird logró el envión necesario para lograr su tercer triunfo en la categoría; mientras que Buemi, al que solo le quedaba el uno por ciento de potencia, prefirió no arriesgar y se aseguró la segunda ubicación que le ayudó a mantenerse al frente del torneo con cuatro puntos de ventaja sobre Di Grassi (habían llegado separados por una sola unidad).
The top three in the #BAePrix take to the podium @sambirdracing @Sebastien_buemi @LucasdiGrassi https://t.co/z0pVop65ql
— FIA Formula E (@FIAformulaE) febrero 6, 2016
Aunque sea una categoría que no hace mucho ruido por sus motores eléctricos, el espectáculo que ofreció la Fórmula E en el ePrix de Buenos Aires bien vale para darle crédito a la flamante división que está transitando por su segunda temporada.
La cuarta fecha del torneo 2015/2016, que se realizó en el callejero de Puerto Madero, quedó para un sólido Sam Bird, quien con este resultado le dio el primer éxito en la divisional al DS Virgin Racing.
El inglés comenzó el sábado de gran forma tras quedarse con la pole position y luego dominó de punta a punta la carrera pese a la presión final del suizo Sebastien Buemi (Renault e.dams), quien largó desde la última posición debido a una clasificación complicada.
La primera parte de la competencia careció de emociones ya que Bird no tuvo inconvenientes para controlar al francés Nico Prost (Renault e.dams) y al portugués Antonio Felix Da Costa (Team Aguri), sus escoltas durante los giros iniciales.
Pero todo cambió cuando los pilotos se subieron al segundo auto para completar las 35 vueltas del ePrix porteño. Bird aprovechó la ventaja que tenía para mantenerse en la vanguardia y tuvo un resto de energía para defenderse de Buemi, quien se vino como una tromba después de superar al brasileño Lucas Di Grassi (Abt Shaeffler Audi Sport).
Con el dos por ciento de su batería en la vuelta final, Bird logró el envión necesario para lograr su tercer triunfo en la categoría; mientras que Buemi, al que solo le quedaba el uno por ciento de potencia, prefirió no arriesgar y se aseguró la segunda ubicación que le ayudó a mantenerse al frente del torneo con cuatro puntos de ventaja sobre Di Grassi (habían llegado separados por una sola unidad).