La agresión de una patora comandada por Rodolfo Torti a un grupo de periodistas registrada el lunes en la noche movilizó a los tres poderes del Estado. Torti, ex secretario gremial del Sindicato de Prensa destituido por irregularidades en la conducción que compartió con el ex titular del gremio, Roberto Picco, condujo a un grupo de forajidos hasta la puerta de la sede del sindicato recuperado con la intención de frenar el proceso de normalización del gremio.
La Justicia investiga el accionar de Torti, quien estuvo al frente de la patota que agredió salvajemente en la puerta de la sede del gremio, en la calle 9 de Julio de ciudad, a un grupo de trabajadores de prensa que se disponían a participar de una reunión informativa. Torti quedó detenido a la espera de la decisión del fiscal Carlos Torres, quien tiene que resolver la situación del jefe de los agresores que provocaron lesiones a los periodistas y se robaron una cámara de fotos.
La patoteada generó que el cuerpo de delegados democráticamente elegido por los periodistas mendocinos el año pasado fuera recibido este martes por la comisión de Derechos y Garantías de la Cámara de Diputados, con la participación también de legisladores de la Bicameral de Seguridad.
Asimismo, los ministros de Gobierno, Félix González, y de Seguridad, Carlos Aranda, escucharon el relato de los delegados en sala de situación del tercer piso de la sede del Ejecutivo Provincial.
Los periodistas explicaron en ambas audiencias la sucesión de hechos ocurridos en la sede del sindicato en calle 9 de julio 1.934, de ciudad, el lunes, cuando resultó con serias lesiones en el rostro el trabajador de prensa César Cambas, brutalmente golpeado por los forajidos. Los agresores conducidos por Torti, como testimoniaron en la Justicia los trabajadores violentados, serían miembros de la barra del Club Pacífico de Alvear, según información a la que accedieron las víctimas.
Los periodistas agredidos no tienen dudas de que detrás de todo lo que pasó está la organización de Roberto Picco, quien llegó a la comisaría cuarta de la Alameda en la noche del lunes, al mismo tiempo que la policía arribó con el detenido Torti.
Los trabajadores de prensa autoconvocados que trabajan en la normalización del sindicato remarcaron que la acción violenta "fue un intento de toma del sindicato que pacíficamente y por las vías legales los periodistas recuperamos después de muchos años de desaciertos por parte de la anterior gestión”.
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