El gobierno de Mauricio Macri logró perturbar la unidad anunciada por las organizaciones integrantes de la CGT bajo una conducción colegiada con representación de los tres sectores preexistentes en la central.
Mientras el triunvirato que conduce la central anunció avances en el diálogo con el macrismo luego de una reunión con funcionarios encabezados por el ministro de Trabajo, Jorge Triaca; el camionero Pablo Moyano convocó a una medida de fuerza con los gremios combativos de la CGT tras conocerse el resultado de la reunión del gobierno con la administración nacional.
En la misma línea de Moyano se expresaron los líderes de las CTA, Hugo Yasky y Pablo Micheli. También promueve una medida el bancario Sergio Palazzo. "Hay mucha bronca, se ha quedado corto lo que se ha acordado con el gobierno", advirtió Moyano.
[youtube]mbSgdQKAfEw[/youtube]Rodolfo Daer, en carácter de vocero del triunvirato que integra junto a Carlos Acuña y Juan Carlos Schmid, dijo que las definiciones de la central están supeditadas a un cónclave con los capos del establishment empresarial con la esperanza de anunciar un bono para todos los trabajadores al final del mismo.
"A mi me da bronca que mientras marchan las CTA y los movimientos sociales contra este gobierno, nosotros nada", facturó Moyano. "Un paro, una movilización, algo hay que hacer porque no podemos aceptar libremente cómo el gobierno juega con los jubilados y los trabajadores", definió Moyano.
Para la cúpula de la CGT, el gobierno se ganó un lapso de tolerancia con la promesa de tender una mesa para la negociación de un bono entre la central y los empresarios. Mientras tanto, aceptaron como respuesta un bono de mil pesos para los jubilados de la mínima y para cada familia con asignación universal.
La eximición del pago de ganancias alcanza a los aguinaldos de los trabajadores que cobran por mes menos de 30 mil pesos. Y hasta ese monto al de los que cobran menos de 55 mil pesos.
Con esos anuncios, la cúpula de la CGT frenó el alarido por un paro del entorno dirigencial y de las bases trabajadoras.
[youtube]UdUTfngYnOI[/youtube]En lo que resta de la semana, se producirá un reacomodamiento en los alineamientos sindicales de cara a la fase final de la rosca de un pacto con Macri, quien considera pagada su parte con una autorización para la transferencia de 29 mil millones de pesos del fisco a las obras sociales administradas por los sindicatos.
La transferencia de la denominada caja de las obras sociales implica unos 12 mil millones de pesos más que el costo del bono para jubilados y la excepción del Impuesto a las Ganancias para los aguinaldos más flacos que anunció el gobierno con el fin de evitar un paro.
