El presidente Alberto Fernández salió a negar una presunta confrontación con los gobernadores por la administración del aislamiento social. Advirtió que "no se puede tener a la gente con un encierro eterno".
Dijo que es partidario de que cada gobernador disponga lo mejor para la salud psicológica de su población. Fue en respuesta a las especulaciones mediáticas sobre un enfrentamiento con algunos mandatarios provinciales.
La referencia del presidente fue a un comunicado conjunto de los gobiernos de la Ciudad de Buenos Aires (Horacio Rodríguez Larreta), provincia de Buenos Aires (Axel Kicillof), Córdoba (Juan Schiaretti) y Santa Fe (Omar Perotti) que desestimó las salidas recreativas que habilitó el gobierno nacional el sábado.
Fernández había dicho entonces que cada gobernador tenía potestad para implementar medidas en la nueva fase de la cuarentena.
"El comunicado que sacaron los gobernadores expresó lo hablado antes conmigo. Todo lo que queremos es preservar la salud de la gente también preservar la situación psicológica de la gente", dijo Fernández en una entrevista con Radio Con Vos, el lunes en la mañana.
El presidente insistió en que cada distrito tiene que evaluar los métodos para "cuidar la salud psicológica" de los ciudadanos.
"Tal vez en el momento en el que hice el anuncio debí haber aclarado que la posibilidad la tenían que ver ellos (los gobernadores), pero tenemos que ayudar a la gente a que tenga recreación, porque hace falta. La gente ha entendido el mensaje que hemos dados y tengo mucha confianza en cómo se comporte", remarcó.
El presidente enfatizó que no hay diferencias con los gobernadores, quienes "han acompañado todas y cada una de las medidas", dijo.
"En estos gobernadores hay vocación de cuidar a su gente y por eso me tienen a su lado, pero tampoco se puede tener a la gente con un encierro eterno", sostuvo.