La ministra de Salud, Ana María Nadal, reforzó en la Legislatura la estrategia del gobierno de culpar a Alberto Fernández por el desborde sanitario en Mendoza a raíz del alza de contagios y decesos de pacientes afectados por la COVID-19.
Entre los pocos detalles que trascendieron de la reunión, Nadal culpó al Gobierno Nacional por la provisión de vacunas, pese a que la Provincia, al mediodía de este jueves y según el Monitor Público de Vacunación al que se puede acceder on line, tenía en stock sin colocar 66.866 dosis.
"No estaríamos con la dificultad que hoy tenemos en Mendoza y en el país si tuviéramos vacunas. Nosotros sabemos que la solución a la pandemia no es solo detectar y ampliar camas de terapia: la solución es vacunar”, soltó la ministra a un grupo reducido de legisladores que tuvo acceso a una exposición, que fue cerrada a la prensa y sin transmisión pública.
Suarez alimentó en las últimas semanas una postura de enfrentamiento con al gobierno nacional por la gestión de la pandemia: mandó al titular de la Dirección de Escuelas a desobedecer lo resuelto por el Consejo Federal de Educación sobre las clases presenciales y se negó a tomar restricciones de circulación acordes a la zona de alto riesgo, como calificó la Nación a Mendoza.
Para mostrar gestión mientras subían los contagios, prohibió reuniones en los domicilios -uno de las medidas de mayor dificultad en el control- y dispuso que las compras en comercios o reservas en restaurantes se hicieran por terminación del DNI de lunes a jueves, mientras que liberó el resto de los días.
Nadal refrendó esa política de enfrentamiento con la Nación, a la que buscó culpar por la provisión de vacunas. Días atrás, el ministro de Hacienda, Lisandro Nieri, reconoció en un raid por medios afines que Mendoza "no puede comprar vacunas porque los laboratorios negocian de manera directa con estados nacionales".
Sin embargo, la propaganda contra la campaña de vacunación nacional, que lanzó Suarez en du discurso frente a la Asamblea Legislativa, siguió en boca de Nadal.
