La madre de Sofía Herrera, la niña desaparecida en Tierra del Fuego en 2008 cuando tenía 3 años, encabezará este martes una marcha en la ciudad de Río Grande, al cumplirse el decimotercer aniversario desde que la pequeña fue vista por última vez, y aseguró que la fecha los "desespera" y "lastima".
María Elena Delgado confirmó que una vez más volverán a marchar por el centro de la ciudad fueguina, para reclamarle resultados a las autoridades policiales y judiciales.
"Nos reunimos como todos los años. Llegamos a otro aniversario triste, a una fecha que lastima. Otro año sin que la justicia, la policía o nosotros mismos podamos hacer algo para encontrarla", sostuvo la mujer en diálogo con Télam.
Delgado recordó que Sofía tenía 3 años y 8 meses en el momento de su desaparición, por lo que ahora es una joven de 16 años, cerca de cumplir los 17.
"Ojalá ella pudiera reconocerse en alguna foto. O alguien cercano le encuentre algún parecido. Llevamos 4.745 días de búsqueda y no nos vamos a rendir. Seguimos cada pista por más insignificante que sea", aseguró la madre.
También contó que hace unas semanas subió a sus redes sociales una imagen de cómo sería Sofía en la actualidad, realizada por una mujer colombiana utilizando una aplicación para celulares.
"No es la actualización oficial realizada por la Justicia, pero es una de las mejores imágenes que he visto de ella. Está sonriente, tan real que me sorprendió verla, y tuvo mucha repercusión en las redes. Ojala eso nos ayude a encontrarla", relató María Elena.
Sobre la investigación
Actualmente está a cargo del juez de instrucción 2 de Río Grande, Daniel Cesari Hernández, la mujer dijo que siguen esperando la detención de José Dagoberto Díaz Aguilar, a quien apodan "Espanta la Virgen".
Se trata de un hombre de nacionalidad chilena y costumbres nómades, que deambula por zonas rurales de Argentina y Chile, y sobre el que existen sospechas de que podría haberse llevado a Sofía.
La justicia llegó a la imputación de Díaz Aguilar por dos caminos distintos: el testimonio brindado por un suboficial de la policía de la provincia que participó de las primeras tareas de búsqueda de Sofía, y por la descripción que brindó uno de los niños que estaba en el lugar donde desapareció la niña fueguina.
"Hace un año esperamos que la justicia encuentre a este hombre. Hasta el día de hoy no lo pueden localizar en ningún lado. Nos dicen que no hay ningún dato sobre su paradero", recordó Delgado.
El momento de la desaparición
El 28 de septiembre de 2008, la familia Herrera salió con amigos a pasar un domingo de esparcimiento en el camping John Goodall, ubicado 59 kilómetros al sur de Río Grande.
María Elena, su marido Fabián Herrera y Sofía se detuvieron en un supermercado a comprar comida y luego en una estación de servicio donde se encontraron con Noemí Ramírez y Silvio Giménez, quienes a su vez estaban con sus hijos de 2 y 9 años.
El grupo llegó al camping situado en el kilómetro 2.893 de la Ruta Nacional 3, en dos autos que estacionaron cerca del camino.
El lugar, un paraje casi desértico, es un rectángulo de 15 hectáreas cercado con un alambre de un metro de altura y seis hilos, el primero de púas.
Sofía se separó por unos instantes de sus padres y desde entonces nadie volvió a saber de ella.
Se calcula que 300 personas restrillaron la zona una y otra vez ni bien se conoció la noticia, mientras las autoridades ordenaban controles en los automóviles y en la frontera con Chile ubicada a 140 kilómetros del lugar.
El caso de Sofía se convirtió en un ícono de la desaparición de personas en el país, que motivó la elaboración de un protocolo de emergencia para situaciones similares (llamado Alerta Sofía) y llevó a las autoridades nacionales a poner en funcionamiento una línea telefónica exclusiva para recolectar datos (08002227634) además del sitio web www.sofiaherrera.com.ar.