Organismos de Derechos Humanos comunicaron este martes el fallacimiento de Oscar Guidonem férreo militante por los Derechos Humanos y activo miembro del proceso de Memoria, Verdad y Justicia en Mendoza.
Oscar estudió medicina en la década del 70, tuvo militancia universitaria en la TUPAC, rama estudiantil de la organización política Vanguardia Comunista (VC). En esos ámbitos conoció y entabló vínculos personales con Luis Moriña y Carlos Espeche, ambos detenidos desaparecidos. Siempre los mantuvo presentes en su memoria y en sus palabras.
Fue secuestrado el 2 de junio de 1976, lo llevaron al centro clandestino de detención que funcionó en la Compañía Comunicaciones de Montaña VIII y estuvo allí hasta septiembre del mismo año, cuando fue trasladado a la Unidad 9 de La Plata. Recuperó la libertad el 20 de agosto de 1978.
Dio testimonios en juicios por delitos de lesa humanidad, ante tribunal y en inspecciones oculares, que aportaron a la reconstrucción del funcionamiento y responsabilidades de esos centros clandestinos; así como del Hospital Militar, donde fue intervenido quirúrgicamente, de manera muy violenta, como consecuencia de la tortura en Comunicaciones.
Integró la Asociación de ex-Presas y ex-Presos Políticos de Mendoza, la Liga Argentina por los Derechos Humanos y el mecanismo de prevención de la tortura local. Formó parte del movimiento de derechos humanos que luchó por la entrega del ex centro clandestino de detención D2 para ser refuncionalizado como Espacio de Memoria. Conformó el Consejo Directivo del EPM y realizó guías de recorridos.
Pocos días atrás, volvió a prestar testimonio para el trabajo de Archivo Oral que realiza la Comisión de Comunicación del Espacio para la Memoria.
Reseña: EPM
