Desde que gobierna Javier Milei el costo de una canasta básica para no ser pobre aumentó en Mendoza 30%, sin contar el alquiler. Según la última medición difundida por la DEIE, una familia de dos adultos y dos niños que no paga alquiler necesita 684.753 pesos para seguir dentro de la clase media. Por debajo de eso, o pagando un alquiler ya es considerada pobre.
Sólo para los alimentos básicos, ese mismo grupo familiar debe contar con 290.149 pesos, por menos de ese dinero para comer es considerado dentro de la población indigente.
Para medir la pobreza se consideran otros bienes como la educación, la salud, el transporte entre otros. En ese combo se miden los servicios básicos de un hogar, pero no el alquiler. Es decir que sí entran tarifazos.
Desde diciembre la inflación en los alimentos no paró en Mendoza. En términos mensuales, el índice que referencia a los precios de la comida creció por encima del IPC en Mendoza en marzo. Alimentos y bebidas registró una suba mensual del 10,8%. En tres meses, el rubro más sensible de la canasta que sirve para medir la inflación, acumuló subas por 46%.
El nivel general del Índice de Precios al Consumidor para el Gran Mendoza registró en Marzo un incremento del 9,2 % con relación a febrero. La inflación interanual llegó al 283%, con una suba del índice de alimentos del 298,7%.
El precio de la comida aumentó casi 300 por ciento en un año en Mendoza