La canasta básica de bienes que una familia necesita para no ser considerada pobre aumentó por encima de la inflación en julio en Mendoza. El IPC medido por el Gobierno dice que hubo una subida general de precios de 4%, mientras que una familia que no alquila debe reunir al menos $836.542, casi 6% más que el mes anterior.
La canasta básica familiar -dos adultos y dos niños- incluye alimentos, transporte, educación, salud entre otros, pero no lo que se requiere para costear un alquiler, lo cual subiría cuantiosamente la cifra. Y la canasta básica alimentaria incluye sólo los alimentos mínimos para no ser indigente.
La canasta de alimentos subió 4,7% respecto a junio: pasó de $322.979 a $338.797 en julio. Es decir que el costo para no ser pobre y el costo para no ser indigente estuvo por encima de la inflación.
En cuanto a la inflación, lo que más subió en julio fueron los costos de vivienda y bienes básicos (8,5%), seguido por bienes y servicios (6,7%) y educación (6,1). Estos datos indican una fuerte incidencia de los tarifazos de servicios como la luz, el agua, el gas y el transporte en el costo de vida.
Los alimentos aumentaron según el Gobierno 3,5%, acumulan 70% desde enero y 264% en un año.
