En la previa del duelo entre Chelsea y Everton, Josh Turnbull con apenas tres años tomó la pelota y enfiló al arco para convertir un gol que fue festejado por los miles de hinchas del equipo londinense.
El hijo del arquero suplente Ross fue el gran animador de la tarde con su tanto convertido y un festejo levantando sus dos brazos y mirando su papá. "¡Contrátenlo!" fue el pedido alunísono de todos los hinchas de Chelsea.
Fuente: Cancha Llena