El presidente de Paraguay, Horacio Cartes, condicionó su vuelta al Mercosur a que Argentina, Brasil y Uruguay le den la presidencia del bloque en lugar de Venezuela. Este 12 de julio en Montevideo, Uruguay, se prevé que el bloque de marcha atrás con la decisión tomada por el bloque hace un año en Mendoza -aquí los presidentes votaron suspender a Paraguay del bloque tras el derrocamiento de Fernando Lugo- .
Sin embargo, Cartes cree que los países deben tener un "gesto de predisposición" hacia Paraguay: "Queremos que se nos dé la presidencia pro-témpore como un gesto de buena predisposición. Si no lo tienen (predisposición) no está al alcance de nuestras manos; es la figura que encontramos", explicó Cartes.
Reunidos en el Hotel Intercontinenal, los presidentes votaron la suspensión temporal de Paraguay en el grupo, una semana después de que el ex mandatario Fernando Lugo fuera destituido en un juicio político en apenas 48 horas. Se decidió además en esta provincia no tomar represalia económica alguna contra Paraguay. "Las represalias económicas siempre las sufren los pueblos, nunca los gobiernos", fundamentó en ese momento la presidenta de Argentina.
En una entrevista concedida a Clarín, Cartes apuntó que esto "requiere de un solo requisito, que se respete la dignidad del Paraguay, del estado de derecho y del propio Mercosur". Y se mostró, al mismo tiempo, contrario a que se le entregue la presidencia a Venezuela, el nuevo socio del bloque sudamericano.
Franco asumirá como presidente el 15 de agosto, pero está prevista una reunión de los mandatarios del Mercosur el próximo 12 de julio, en Montevideo, donde el mandatario paraguayo pretende que su país recupere la presidencia pro-tempore de este semestre.
"Ya he dicho varias veces. No hay secretos. Particularmente soy muy agradecido a la Argentina. Mucha gente que habla desconoce que tenemos un millón y medio de compatriotas que viven y trabajan en la Argentina, por no encontrar sustento en el Paraguay...", dijo Cartes.
"Pedimos que se reincorpore a Paraguay en forma plena, y que no asuma Venezuela esa presidencia porque, de ser así, de nada servirá todo lo conversado y toda la predisposición que tuvimos", remarcó y luego insistió con que "lo que no se puede perder es el diálogo".