Entrevistada por el periodista e historiador Hernán Brienza para la Televisión Pública y Radio Nacional, Cristina Fernández definió al kirchnerismo como "una etapa de la historia".
Precisamente dijo: “El kirchnerismo es un fenómeno que tiene que ver con la aparición de una generación en una Argentina dada vuelta que vienen del peronismo pero que incorpora otros sectores que no eran peronismo, incluso quienes no simpatizaban o no les gusta el peronismo o pejotismo para algunos. Es una etapa de la historia. Uno es instrumento de la historia”.
Agregó: “Yo siento que la historia me maneja a mí. Creo que Néstor sintió lo mismo, que es un instrumento de la historia que se produce a sí misma en cada etapa para ocupar un determinado rol histórico".
"Yo estuve en Ezeiza y fue muy heavy, salí corriendo. Fue una frustración de todos los argentinos Ezeiza, si bien los jóvenes tuvieron un rol muy fuerte en el retorno de Perón. El pacto social de Perón fue casi revolucionario y en ese momento fue muy criticado", recordó.
“Mi relación con Perón es de reconocimiento absoluto de su liderazgo. Hubo un intento de demonización y estigmatización del peronismo. Era un mundo muy complejo", añadió.
Tras hablar del liderazgo de Perón, Cristina dijo que "todo el mundo tiene derecho a cuestionar todo", que no le "preocupan" ni "desvelan" las críticas y que los liderazgos "son o no son", dentro del marco democrático, aclaró.
"Fui oposición interna en los '90. La discusión es política, no de agravio o insulto. Cuando hay insulto, agravio y descalificación es porque faltan ideas", lanzó.
Después admitió, en plural, haber cometido "errores y equivocaciones". Pero agregó: "Una gran parte de los argentinos, por suerte, puede decir que está mejor que hace cinco años, no ya que en 2003, cuando había 25% de desocupación".
La nota con el periodista Hernán Brienza fue emitida este sábado al mediodía en simultáneo por la Televisión Pública y Radio Nacional. La emisión duró media hora y el próximo sábado será televisada la segunda parte.
El comienzo del reportaje estuvo marcado por temas económicos: el pago de la deuda, la situación del país, dólares, capitales, la "implosión en 2001". La Presidenta justificó el cepo cambiario, cuestionó a los holdouts , defendió su política económica y apuntó contra los medios (el "fenómeno de los monopolios mediáticos").
"Un apriete no es una (un arma calibre) 45 en la cabeza, sino que armen una corrida financiera", lanzó.
En la Residencia de Olivos, sentada frente a Brienza, con un saco negro con botones blancos y el pelo suelto, la mandataria contestó las primeras preguntas con muchos detalles. Habló de "mundo buitre", de "guaridas fiscales" y consideró que "hay un mundo muy complejo y difícil que requiere de mayor heterodoxia".
"Esta Argentina crece al 5% en un mundo que se cae, cualquiera sea el índice con el que quieras medirlo", aseguró.