Impotente para resolver el conflicto que paraliza la salud, Matías Roby salió a decir que él vuela más alto que los sindicalistas

"Las águilas no cazan moscas. Volamos a otra altura...", provocó el ministro a los trabajadores que sostienen un plan de lucha en el marco de una meneada negociación paritaria.

Con los servicios de salud para los más pobres funcionando a medias y los trabajadores de los hospitales y centros sanitarios acampando en la Casa de Gobierno, el ministro de Salud, Matías Roby, salió a decir que él vuela más alto que los representantes sindicales del ámbito de su cartera, con los que está negociando las condiciones laborales de los trabajadores que atienen las enfermedades de la población más vulnerables.

Roby dejó de lado las tácticas de ablande de la topa gremial que dominan los expertos de la política para recalentar la parrilla de la negociación con una autoalabanza de su capacidad en desmedro de las de los dirigentes de la contraparte en conflicto creciente.

El ministro de Salud usó Twitter para dejar en claro que cree que él vuela más alto (como decía el eslogan de Celso Jaque de la Provincia) que los líderes sindicales de ATE y AMPROS. El funcionario salió con esa declaración en medio de una estrategia del Gobierno para romper la unidad de los trabajadores del ámbito estatal.

El gobernador Francisco Pérez fue el primero en plantear la jugada: "queremos que los que menos cobran tengan más aumento", dijo el mandatario en el inicio de las paritarias estatales, pero en el primer escenario en puso en juego esa estrategia fracasó por completo: los docentes representados por el SUTE rechazaron la movida oficial desde las asambleas en las escuelas hasta el plenario provincial de delegados.

Roby había asumido que en su área se terminaría de acordar luego de que se cierre la paritaria de los docentes, que arrancó primero y está más avanzada que la de Salud. El ministro también había apostado a generar el enfrentamiento entre los trabajadores que menos cobran y los que más perciben en su ámbito. En su cuenta de Twitter resumió el concepto del discurso que distribuyó por todos los medios mientras las bases de los gremios de la Salud debatían la postura para las paritarias.
 

La operación del ministro hacia el interior de las organizaciones sindicales de la Salud fracasó y terminó con los gremios de los trabajadores dependientes de sus cartera acampando en la Casa de Gobierno y las bases unidas en la demanda de 45% de aumento sustentada en la pretensión unificada desde las asambleas de trabajadores.