El fiscal del juicio por el homicidio de José Luis Bolognezi no levantó cargos contra los dos imputados en la causa. Fernando Guzzo consideró que no se probó durante la investigación ni durante el juicio oral y público la participación de Abdo Girala y Carlos Metralleta Pérez en el asesinato del joven de 19 años ocurrido en la mañana del 14 de setiembre de 2002, en San Martín.
La decisión del fiscal es una clara señal para que el juicio termine sin condenas, porque, aunque los abogados que representan a la familia de la víctima pidan una sanción, sería inédito que la Cámara del Crimen emitiera una condena sin acusación del fiscal.
El portal Este Online informó que el fiscal ofreció un extenso alegato en el que terminó eximiendo de cargos a los imputados durante una audiencia celebrada este miércoles, mientras la atención pública estaba centrada en el partido de la Selección contra Nigeria por el Mundial.
Guzzo hizo hincapié en la serie de irregularidades durante el proceso de instrucción, que -tal como ocurrió en el primer debate, que fue anulado por la Corte por carencia de imparcialidad en el jurado- entorpecieron la generación de pruebas directas en contra de los únicos dos imputados.
La causa por la muerte de Bolognezi está siendo sometida a juicio oral por segunda vez. Hace cinco años el Ministerio Público pidió 12 años de prisión para los acusados, pero la Cámara los absolvió en un fallo que luego fue dejado sin efecto por la Suprema Corte, al considerar que el tribunal actuó con favoritismo hacia los imputados.
La absolución en la primera oportunidad fue seguida de incidentes provocados por vecinos indignados por la decisión del tribunal. La segunda sentencia se conocerá en medio del Mundial, un elemento de distracción fenomenal, como ningún otro.
La decisión de Guzzo expresada este miércoles era previsible puesto que el funcionario ya había invalidado por considerarlo falso el testimonio de Ana María Puebla, la única testigo ocular que mantuvo en los dos juicios la versión de que Bolognezi murió tras ser agredido por los sospechosos.
Este Online recordó que durante el presente juicio tres peritos psicólogas señalaron ante el Tribunal que el testimonio central de Puebla "no ha sufrido modificación a lo largo del tiempo" y que "su relato es veraz". La mujer dijo que vio una dura golpiza.
La pericia del Cuerpo Médico Forense descartó la existencia de una dura golpiza antes del fallecimiento del joven, atribuyendo la muerte a una insuficiencia cardíaca que sobrevino a una fuerte y dilatada presión sobre el cuello que afectó el nervio vagal.
“Han sido 12 años de proceso y de humillación para la víctima, la familia Bolognezi, los imputados y para toda la sociedad por parte del Estado”, indicó en su exposición el fiscal Guzzo, citado por el portal Sitio Andino.
Para Guzzo no se ha podido acreditar el lugar del homicidio, la relación entre los imputados y la víctima, y el móvil del hecho.
“No tenemos indicios, no hay un punto que nos sirva de anclaje”, señaló el fiscal en referencia a que todo lo que apunta contra los sospechosos del asesinato se basa en rumores y conjeturas.
El jueves continuará la lectura de los alegatos con el turno de la querella, representada por el abogado Sergio Salinas. Mientras que el viernes llegará el momento de escuchar a la defensa de Abdo Girala y Carlos Pérez, a cargo de los abogados Juan Carlos Ruiz y Alejandra Ruiz.
El lunes, tras siete meses de debate, el tribunal presidido por Eduardo Orozco e integrado por Viviana Morici y Ariel Spektor, dará su sentencia final sobre el caso ocurrido en la madrugada del 14 de setiembre de 2002.
