A pocas horas del inicio del torneo Final se confirmó la vuelta de Juan Román Riquelme a Boca. Pasaron siete meses desde que dejó el club, tras perder la final de la Copa Libertadores ante Corinthians, en Brasil, el 4 de julio. Amagó con volver antes del inicio de la pretemporada, pero al último momento gambeteó al Virrey Carlos Bianchi y al presidente Daniel Agelici y se volvió al barrio a "comer asados, tomar mates y jugar a la pelota con los amigos", mientras el plantel corría por la arena de Tandil a las órdenes del profesor Santella.
La vuelta efectiva comenzó a gestarse el lunes, cuando su representante, Daniel Bolotnicoff, manifestó que Riquelme llamó a Carlos Bianchi para ponerse a disposición, tras quedar muy preocupado por la derrota de Boca ante River, en Córdoba. Se inició entonces un nuevo capítulo de la novela de enredos entre Boca y Román, que se terminó este viernes con la ratificación de su vuelta.
El presidente del club de la Ribera volvió a la Argentina en la mañana del viernes, luego de asistir a un congreso en Qatar. Por la tarde, se juntó con Riquelme y su representante y, de allí, se marchó a la reunión de comisión directiva, en la Bombonera, donde se terminó de definir el regreso del crack.
Riquelme no juega desde aquel 4 de julio del año pasado. Se estuvo entrenando por su cuenta, aseguró. Boca debuta mañana en el torneo Final ante Quilmes, en la Bombonera, y, el miércoles, también como local, se medirá ante Toluca, de México, por la Copa Libertadores. Habrá que ver qué decide Carlos Bianchi sobre el enganche, de 34 años, y cómo lo recibe el vestuario, donde el 10 tiene enemigos y aliados.
Es el cuarto ciclo de Riquelme en Boca, tras el paso por la primera entre 1996 y 2002, un breve ciclo en 2007 y, luego, entre 2008 y 2012.
Fuente: Cancha Llena
