Independiente Rivadavia le ganó 2 a 1 a Independiente de Avellaneda, en el estadio Bautista Gargantini, por la 26ª fecha de la B Nacional. Los goles del local los marcaron Lucas Gamba y Ezequiel Pérez, en la primera mitad. Mancuello marcó para el Rojo, en la segunda parte.
La Lepra jugó con 10 futbolistas desde los seis minutos del primer tiempo por la expulsión Caballero. En el conjunto mendocino se destacaron Walter García, el aquero Josué Ayala y, fundamentalmente, el talentoso enganche Ezequiel Pérez.
El juego comenzó con el Rojo en neta postura ofensiva y el local parado para salir de contraataque, situación que se profundizó a los 6 minutos con la expulsión del defensor Leandro Caballero, tras una entrada fuerte al volante Martín Zapata. Entonces, pareció que se generaba el marco ideal para la vuelta al triunfo del Rojo.
Sin embargo, a los 14 minutos, Lucas Gamba sorprendió al recibir solo un pase de Ezequiel Pérez, de tiro libre dentro del área, y definir de derecha al ángulo del arquero Diego Rodríguez.
Independiente de Avellaneda continuó con cierta displicencia a pesar del resultado adverso, siendo Federico Mancuello el único que generaba peligro. A los 19 minutos, el volante convirtió un gol que fue anulado por una posición adelantada marcada por el asistente Diego López. La repetición de la televión condenó al juez de línea.
El visitante continó sin mostrar cambios de ritmo y sin poder hacer valer el hombre de más, hasta que a los 30 minutos, tras una pelota perdida por Hernán Fredes, el mendocino Ezequiel Pérez remató con pierna izquierda ante la mirada pasiva de seis jugadores del Rojo y colocó la pelota abajo, a la izquierda, tras una floja respuesta del arquero Diego Rodríguez. Fue un golazo de uno de los mejores jugadores del partido. Antes del final del primer tiempo, el entrenador visitante, Omar De Felippe, cambió al marcador de punta Vallés por el habilidoso mediapunta Matías Pisano.
La segunda etapa continuó con Independiente de Avellaneda jugando en campo rival, pero así y todo los de De Felippe evidenciaron incapacidad para lastimar y generar acciones de riesgo.
Recién a los 22 minutos se produjo la primera aproximación al arco contrario del visitante por un cabezazo de Sebastián Penco a las manos del arquero Josué Ayala.
Con un jugador menos y dos goles de ventaja, el equipo mendocino se refugió atrás, mientras el elenco de Avellaneda no mostró movilidad como para inquietarlo.
A los 38 minutos, una jugada de Pisano terminó en poder de Mancuello, en medio de una confusión defensiva en la Lepra, y el zurdo la mandó a la red con remate esquinado, imposible para el aquero Ayala.
A los 41 minutos, el Rojo pudo empatar con un cabezazo de Adrián Fernández que llevaba destino de red, pero la pelota fue interceptada por la testa del defensor Walter García y le cayó a Penco, quien pifió en la definición.
Tras esa jugada no hubo tiempo para más. Independiente Rivadavia resultó más efectivo para superar a un homónimo de Avellaneda, que sigue preocupado porque los números ya no entregan la ventaja de otrora.
En la próxima jornada, el Rojo recibirá en el Libertadores de América a Huracán, el sábado a las 20; mientras la Lepra visitará a Defensa y Justicia en el estadio Norberto Tito Tomaghello.
Los goles