En el contexto de una degradación salarial que licuó los salarios desde que se cerró la paritaria en marzo de este año, con la inflación más alta del país en Mendoza, y con el Ejecutivo ofreciendo sólo 7% de recomposición de los sueldos, el gremio de estatales SITEA -excluído de las paritarias por el Gobierno de Rodolfo Suarez- pidió que los salarios equiparen el costo de la canasta básica y que el aumento sea en el básico.
Referentes de este gremio se presentaron el jueves en el reinicio de las paritarias para plantear su postura y allí se generaron algunas discusiones con miembros de otros sindicatos como el SUTE (maestros) y ATE (estatales), que en marzo aceptaron la oferta oficial pero, al menos por ahora, rechazan el 7%. Tampoco AMPROS, de los profesionales médicos, aceptó el ofrecimiento.
En tanto, SITEA se diferenció de ATE al exigir que el aumento equipare a la canasta, sea en blanco y vaya al básico. Además, firmaron un acta en la que exigen que el aumento se indexe por inflación, una condición que el Gobierno rechaza de plano.
"El ofrecimiento del gobierno ha sido 7% para agosto, no acumulativos, calculado sobre el sueldo de diciembre de 2021, o 4500 pesos hasta fin de año, algo totalmente alejado de la recomposición salarial que necesitamos quienes sostuvimos y sostenemos la salud de la población mendocina. Ante este desprecio del gobierno con los y las trabajadoras de la salud, nos declaramos en estado permanente de huelga, asamblea y movilización", señalaron trabajadores autoconvocados del Hospital Central.
Precisamente ese sector de trabajadores, precarizados e ignorados por Suarez y su ministra de Salud, Ana María Nadal, es uno de los que se mantiene en las calles desde fines de 2019 por las condiciones precarias a las que son sometidos por el Ejecutivo.
Este es el acta de SITEA: