La Presidenta, acompañada por los principales candidatos oficialistas en Capital Federal y la Provincia de Buenos Aires, evitó referirse directamente a la derrota en distritos clave y arengó a militar hasta octubre.
La presidenta Cristina Fernández se colocó en el centro del escenario del oficialismo después de conocerse la tendencia de los guarismos arrojados por las PASO, que fueron negativos para el kirchnerismo en gran parte de los principales distritos electorales del país. Desde ese lugar, en primer lugar nacionalizó la elección y remarcó que en la sumatoria total de votos el Frente para la Victoria se constituyó en la primera minoría a nivel país, fundamentalmente porque ninguna otra fuerza presentó listas en todos los distritos.
"Por esa razón tenemos una mayor responsabilidad, porque somos la primera fuerza y somos gobierno", aseguró la Presidenta antes de hacer referencia a las elecciones en distritos claves como la Provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma, donde los candidatos del oficialismo quedaron relegados.
Cristina se dirigió al país desde el comando electoral nacional del Frente para la Victoria (FPV) montado en el hotel Intercontinental.
"Tenemos un gran desafío, dado que estamos presentes en los 23 distritos de Argentina y, si bien esta es una elección preliminar, estaríamos en condiciones de mantener y aumentar la representación parlamentaria, tanto en el Senado como en Diputados", expresó.
El candidato del kirchnerismo por la provincia de Buenos Aires, Martín Insaurralde, fue derrotado por Sergio Massa, mientras que en la Ciudad de Buenos Aires el FpV quedó tercero detrás de UNEN y el PRO.
En ese contexto, la jefa de Estado recordó la derrota del ex presidente Néstor Kirchner en 2009: "Quiero recordar otro momento en este lugar, cuando vos Daniel (Filmus) estabas al lado de él. En 2009 se presentó aquí el hombre que la cambió la vida a la Argentina y a los argentinos y reconoció su derrota como candidato. En ese momento, como en la actualidad, mi gran responsabilidad es darle gobernabilidad a la Argentina en un mundo complejo".
Cristina estuvo acompañada en el escenario por el vicepresidente Amado Boudou, el gobernador bonaerense Daniel Scioli, el jefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina, el ministro de Interior, Florencio Randazzo, y el titular de Diputados Julián Domínguez.
Junto a ellos, además de Filmus, se encontraban los candidatos en la Provincia, Martín Insaurralde y Juliana Di Tullio, a quienes también la mandataria felicitó por el resultado obtenido.
Al referirse al performance de Insaurralde, quien cosechó 28,62 de los votos contra el 34,26 de Sergio Massa, escrutadas el 52 por ciento de las mesas, Cristina señaló: "Quiero agradecer a un compañero que hasta hace un mes y medio era apenas conocido y con su esfuerzo, con apenas el 20 por ciento del electorado conociéndolo, logró una excelente pre-elección".
Ya en campaña para octubre, Cristina dijo que "no esperen que en estos dos meses y medio vaya a prometer cosas que no voy a hacer porque me siento muy responsable. Si tengo algún orgullo es mirar a los ojos de los argentinos y decirles que hemos hecho cosas que jamás dijimos que íbamos a haber en una campaña electoral".
"Somos la mayor fuerza nacional"
"En 2009 perdió él y asumió un diputado, pero los que tuvimos que seguir laburando y poniendo la pechuga para que los argentinos sigan teniendo las cosas fuimos nosotros", recordó la Presidenta el triunfo de Francisco De Narváez.
"Somos la mayor fuerza nacional y además somos Gobierno", recordó Cristina Kirchner. Y tomó palabras de Massa, principal rival de kirchnerismo, quien había dicho que la campaña era "David contra Goliat". La jefa de Estado le respondió: "Nosotros somos David", tras resaltar el desgaste de ejercer el Gobierno.
"Lo importante es que sepamos que vamos a seguir profundizando esa transformación, esto nos obliga a redoblar el esfuerzo y la militancia", dijo.
A pesar del revés que tuvo el oficialismo en distritos clave, el kirchnerismo se impuso como principal fuerza a nivel nacional, gracias a la presencia que tiene en todos los distritos del país.
Ese capital le podría dar más poder al oficialismo en el Congreso. En Diputados: de las 127 bancas que se renuevan, sólo 34 pertenecen al FPV. En tanto, según los primeros resultados, de los ocho distritos que elegían senadores, el kirchnerismo se imponía en seis.
