El gobernador Rodolfo Suarez y su ministra de Salud, Ana María Nadal, salieron a buscar médicos extranjeros para atención en hospitales de Mendoza, ante el desborde del recurso humano y las terapias intensivas al 100% de ocupación.
A través de la resolución 1941 el Ejecutivo autorizó una matrícula provisoria a médicos que hayam estudiado en el exterior y todavía no han podido finalizar el trámite administrativo de revalidación.
"Esta matrícula provisoria se otorga previa verificación, por el departamento de Matriculaciones, donde se realiza la certificación de firmas y el cumplimiento de las condiciones y requisitos requeridos para todas las habilitaciones. Además de la acreditación que identifique el inicio del trámite en el organismo provincial y o nacional de competencia y de constatar que la institución que emitió el título en el país de origen cuente con el ministerio con registro fehaciente de matrículas habilitadas", indica la reglamentación.
"Esta medida permitirá a la Provincia contar con más recurso humano disponible en los equipos sanitarios, tan necesario en el marco de pandemia por el COVID-19", admitió el gobierno ante el panorama crítico que se vive en hospitales y centros de salud de toda la provincia.
Nadal señaló que esto permitirá certificar de manera rápida a extranjeros para que estén disponibles para atender casos de COVID-19. “Esta Resolución abarca todos los profesionales extranjeros que han realizado la reválida. Y permite al departamento de Matriculaciones de Mendoza, que una vez cumplido los requisitos formales, pueda otorgar una matrícula provisoria a los profesionales a los extranjeros”.
No hay camas, tampoco médicos suficientes
Tres de los hospitales más importantes de Gran Mendoza -el Central, el Lagomaggiore y el Hospital Del Carmen-estan con las terapias intensivas al 100% de ocupación por COVID-19 y por otras patologías. Muchos pacientes que necesitan respirador deben esperar en la guardia o incluso se intubados en las guardias mientras esperan que se desocupe una cama.
Por cada paciente en terapia intensiva, explican los especialistas, se necesitan cuatro enfermeros más los profesionales específicos de las UTI. Con los crecientes contagios entre trabajadores de la salud -que en los últimos días sumaron además varios decesos- esa necesidad es muy difícil de cubrir.
Mendoza está entre las cuatro provincias con mayor cantidad de denuncias de trabajadores afectados por COVID-19 según un relevo realizado por las ART. En ese universo, la mayor cantidad de contagiados está entre trabajadores de la salud.
No obstante, muchos se contagian sin ingresar en la estadística, ya que se desempeñan con contratos precarios. En el caso de Mendoza son más de 2000 los trabajadores de la salud en esas condiciones. Poco más de 200, prometió el gobierno de Rodolfo Suarez, pasarían a planta en los próximos meses.