
Con la recuperación de la identidad del Nieto 131, se resuelve otro de los casos de bebés robados que vivían bajo una falsa identidad. Anteriormente, con investigaciones de Abuelas de Plaza de Mayo se recuperó la identidad de Rebeca Celina Manrique Terrera, Claudia Domínguez y Miriam Poblete Moyano.
En 2014, previo a estos hallazgos, según un informe de organismos de DD.HH. de Mendoza, eran seis las personas que aún vivían bajo falsa identidad.
Las mendocinas María Domínguez y Angelina de Castro son las abuelas de la nieta recuperada 117
El hallazgo de Manrique Terrera, Domínguez y Poblete Moyano tuvo consecuencias judiciales, ya que implicaron procesamientos para jueces y fiscales que omitieron investigar el destino de sus padres, así como condenas a sus apropiadores en sendos juicios de lesa humanidad realizados en Mendoza.
Resta determinar el destino de los hijos o hijas de María Inés Correa Llano y Carlos Ángel Jakowcyk, Olga Roncinelli y de Adriana Irene Bonoldi y Marcelo Guillermo Carrera.
Adriana Irene Bonoldi y Marcelo Guillermo Carrera
Adriana era maestra de música y al momento de su desaparición tenía 23 años. Marcelo era empleado y al momento de su desaparición tenía 22 años.
Marcelo fue secuestrado el 24 de noviembre de 1976 en su domicilio de Godoy Cruz.
Esa noche Adriana fue golpeada, maniatada y abusada y luego encerrada en el baño. Adriana desapareció el 1 de diciembre del mismo año, seis días después, cuando regresaba del acto de fin de año de la escuela donde enseñaba.
Estaba embaraza de dos meses. Su hijo/a debió nacer en junio de 1977.

María Inés Correa Llano y Carlos Ángel Jakowcyk
María Inés era médica y maestra, cuando desapareció tenía 26 años. Carlos Ángel nació en La Plata y al momento de su desaparición tenía 32 años.
La pareja fue secuestrada en su domicilio en La Puntilla, Godoy Cruz, el 16 de septiembre de 1976. Inés estaba embarazada de cinco o seis meses. El niño debió nacer entre diciembre de 1976 y febrero de 1977.
Ninguno de los dos tenía militancia política conocida, pero sí eran conocidos por sus tareas sociales, ya que colaboraban con el padre José María Llorens en el barrio San Martín de la ciudad de Mendoza.
Olga Inés Roncelli
En su adolescencia colaboró con el padre Llorens en la construcción de viviendas en el Barrio San Martín, experiencia que marcaría su camino en pos de la lucha por el cambio social. Además, estudió italiano (tal vez motivada por la ascendencia de su familia paterna) en el Instituto Dante Alighieri. Tocaba la guitarra y cantaba en ese idioma. También practicaba gimnasia de aparatos.
Ejerció la docencia en tres escuelas: Nuestra Señora del Rosario, en Lavalle, en la Escuela Técnico Agraria de Costa de Araujo, y en el Magisterio, lugar de donde fue secuestrada. Además, daba clases de Física en el preuniversitario de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Cuyo.

El 22 de agosto de 1970, a sus 21 años, se conocieron con Alfredo en una discoteca bailable. Iniciaron una relación de noviazgo y el 16 de diciembre de 1972 se casaron. Para esa época se fueron a vivir a un departamento en calle Catamarca, de Ciudad de Mendoza. El 29 de enero de 1976 nació Emiliano, hijo de la pareja.
Colaboraba con el Padre Llorens en el Barrio San Martin de la ciudad de Mendoza y militaba en la organización comunista Poder Obrero.
Al momento de su desaparición, estaba embarazada, se estima que de dos meses. Debe haber dado a luz a mediados de 1978.
Éste caso fue dado a conocer por Hermanos en el acto realizado en la sala de la Suprema Corte de Justicia del 2 de octubre de 2014, oportunidad en la que el Poder Ejecutivo provincial puso a disposición del Ministerio Público Fiscal Federal las actas de los nacimientos de los años 1974 a 1983.
Con información de Xumek/Abuelas de Plaza de Mayo/Archivo Explícito/lesahumanidadmendoza.com