Dos bombas estallaron en la mañana del sábado en el Donbass Arena de Donetsk (Ucrania), el estadio del Shakhtar, el equipo de fútbol que domina la Liga ucraniana. El club confirmó que se produjeron numerosos daños en las instalaciones, pero que ninguno de los trabajadores del Shakhtar resultó herido por las explosiones.
Las bombas estallaron a las seis de la mañana, según informó el club. El estadio sufrió múltiples daños en la zona de comunicaciones, de equipamiento y en la zona de control de energía.
"El 23 de agosto, a las 6:00, dos poderosas explosiones ocurrieron en el Donbass Arena. Como resultado de los bombardeos, hay numerosos daños y perjuicios de la fachada noroeste del estadio, comunicaciones, equipamiento y edificio independiente del centro de energía, que se encuentra en la parte norte del parque Donbass Arena. No hay víctimas entre el personal del estadio", informó el comunicado del club.
Ante la tensa situación en Donetsk, ciudad en la que prorrusos y ucranianos combaten por el poder, el Shakhtar anunció que esta temporada no jugaría sus partidos como local en el Donbass Arena, sino muy lejos de allí, en Lviv. La sede del club también se ha trasladado por el momento de Donetsk a Kiev. Todo esto sucede después de que durante la pretemporada varios jugadores del Shakhtar se negasen a volver a Ucrania.
El Donbass Arena, un estadio estrenado en 2009 con 51.000 personas de capacidad, fue utilizado para la Euro 2012. No es la primera instalación deportiva de la zona que sufre ataques en estos meses: el pabellón de hockey de Donbass fue quemado en mayo, supuestamente por militantes prorrusos.