
El proyecto minero San Jorge volvió al centro del debate público tras el envío de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) a la Legislatura provincial. El anuncio coincidió con la apertura de Argentina Mining Cuyo 2025 en la Nave Cultural, donde empresarios y funcionarios celebraron el avance del expediente, mientras asambleístas y vecinos preparaban nuevas protestas.
Metil Isobutil Carbinol (MIBC), Isobutil Xantato de Sodio (SIBX), Poliacrilamida Aniónica (APAM) y Óxido de Calcio (CaO) son los químicos que usará San Jorge
“Las exigencias son lógicas”, afirmó el CEO de San Jorge, Fabián Gregorio, en una entrevista radial. El empresario celebró la resolución oficial de 156 artículos y aseguró que las condiciones impuestas por el Gobierno “no afectan negativamente” a la empresa. Incluso consideró que “son mejores que las propuestas que le habíamos hecho al Gobierno”. Es decir, para San Jorge sigue siendo rentable el proyecto.
Una DIA con promesas de monitoreo, participación y control
El documento establece cinco ejes fundamentales: agua, biodiversidad, patrimonio cultural, emisiones y participación ciudadana. Entre las medidas destacadas figuran:
- Monitoreo hídrico automatizado y gestión de efluentes auditada por Irrigación.
- Revegetación con flora nativa y protección de vegas y ciénagas.
- Registro georreferenciado de hallazgos arqueológicos y participación de comunidades huarpes.
- Control de emisiones y estrategias de mitigación climática.
- Creación de una Unidad de Gestión Ambiental con auditoría social y visitas abiertas.
Además, se prevé la implementación del Sistema Integrado de Monitoreo y Alerta Temprana (SIMAT), con telemetría, cámaras y trazabilidad de cargas, conectado al Centro de Control de la Policía Ambiental Minera.
El Gobierno exige también programas de integridad y compliance, informes de sostenibilidad y un protocolo de vinculación comunitaria. Se crea un Fondo Socioambiental para compensaciones ambientales, empleo local y desarrollo de proveedores regionales.
Audiencia pública: entre tensiones técnicas y relatos de abandono
El sábado 2 de agosto se realizó la audiencia oficial en Uspallata y allí Gregorio defendió el uso de químicos como ácido sulfúrico y xantato, amparándose en la Ley 7722. “No hay nada ilegal ni improvisado”, respondió ante las objeciones de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Cuyo.
Un informe técnico de la Facultad de Medicina de la UNCuyo alertó sobre la peligrosidad de las sustancias químicas que planea usar la minera San Jorge en Uspallata. Los especialistas desaconsejaron su implementación por sus efectos nocivos en la salud humana y el medio ambiente.
El estudio, solicitado por el Rectorado de la UNCuyo para ser incoporado al dictamen de la Fundación, analizó el impacto de cuatro productos químicos utilizados en la extracción de cobre. Liderado por expertos en bioquímica, epidemiología y salud pública.
Concluyó que el Metil Isobutil Carbinol (MIBC), el Isobutil Xantato de Sodio (SIBX), la Poliacrilamida Aniónica (APAM) y el Óxido de Calcio (CaO) presentan riesgos significativos.
A pesar de las promesas empresariales, organizaciones ambientalistas y académicos advierten sobre la afectación de vegas, acuíferos y cuencas subterráneas y cuestionan la falta de estudios actualizados sobre impactos acumulativos en zonas de alta montaña.


