El gobierno de Rodolfo Suarez mantendrá todo como está. Al menos eso trasciende de boca de los funcionarios que salen a comentar la pandemia.
"Estamos en una situación de amesetamiento alto, pero sostenido; sin un crecimiento de casos importante", proclamó el ministro de Gobierno, Víctor Ibañez, para justificar la política oficial.
En esa línea, el gobierno de Suarez anunció que no cortará la presencialidad en las escuela, que es más peligrosa para los docentes que para los alumnos. Los que enseñan van a las escuelas todos los días, los chicos un tercio del tiempo, con viento a favor.
"Los números que tenemos y que se relevan a diario no dan hoy un resultado que implique la suspensión de la presencialidad en las escuelas, que permanecen con niveles de contagios bajos", descalificó Ibañez el clamor del sector docente, en el que se contaron muertos en las últimas semanas.
El amesetamiento al que apela el gobierno incluye más de 20 muertos por día.
Es constante el ritmo de decesos en Mendoza: desde hace diez días hay más de 20 diarios
Desde el 9 de mayo, cuando se reportaron 21 personas fallecidas afectadas por la COVID-19, ningún día se contaron menos de 20 muertos, algunos sin llegar a ser atendidos como lo requerían por falta de infraestructura sanitaria. Más de 2.200 personas murieron con COVID en Mendoza desde marzo del año pasado.